Nina Loguntsova llega temprano a la escuela para prestar atención al estilo de soldado, y se va tarde después de clases adicionales que incluyen criptografía. Tres uniformes militares diferentes cuelgan en su armario.
El estudiante de 17 años de edad es parte de un programa de educación militar en expansión en las escuelas públicas de Moscú que tiene como objetivo inculcar el respeto por los servicios de seguridad e impulsar el conocimiento de matemática e informática de los posibles reclutas.
Por: Anton Troianovski y Ellen Nakashima – The Washington Post / Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Uno de los socios del programa es la agencia de inteligencia militar rusa conocida como GRU, cuyas huellas dactilares, según afirma West, se encuentran cada vez más en operaciones sospechosas ordenadas por el Kremlin en todo el mundo.
La lista incluye piratear correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata en 2016, encabezando la intervención de Rusia en Ucrania y el ataque de agentes nerviosos en Gran Bretaña a principios de este año.
Los nuevos detalles descubiertos por The Washington Post también muestran que una unidad de GRU ha estado a la vanguardia de los esfuerzos de guerra psicológica de Rusia, incluido un intento de influir en la política de Ucrania en el Congreso en 2015.
A medida que el presidente ruso Vladimir Putin afianza su control en el país y afirma la influencia rusa en el extranjero, la agencia de inteligencia militar del país, una red mundial de miles de oficiales, tropas de fuerzas especiales y espías , se está convirtiendo en una de sus herramientas más poderosas.
“Una agencia de inteligencia militar que solía ser estrictamente militar ahora se ha convertido, por así decirlo, en universal”, dijo Nikita Petrov, historiadora de las agencias de inteligencia soviéticas en Memorial, una organización de historia y derechos civiles en Moscú. “Lo que sabemos sobre sus fallas. Pero no sabemos de sus éxitos “.
Este retrato del alcance de la GRU, desde las aulas de Moscú hasta las oficinas de los senadores de EE. UU. En Capitol Hill, se basa en entrevistas en Moscú y Washington, registros públicos e información proporcionada por funcionarios de inteligencia occidentales. El Ministerio de Defensa de Rusia, que supervisa el GRU, no respondió a las solicitudes de comentarios.
El ascenso de la agencia refleja las tácticas del Kremlin en su confrontación con Occidente, dicen los analistas. Mientras que Rusia es mucho más débil económicamente que Estados Unidos y Europa occidental, Putin ha mostrado un mayor apetito por el riesgo y se ha beneficiado de un público nacional que en gran medida se adhiere a la narrativa de una Rusia en estado de sitio.
“Rusia es nuestra madre patria”, dijo Loguntsova, estudiante de 11 ° grado. “Lo defenderemos”.
Los ex funcionarios de inteligencia de los Estados Unidos dicen que el GRU siempre ha sido visto como el primo más brutal de la principal agencia de inteligencia de Rusia, anteriormente conocida como KGB. Gennady Gudkov, un político de la oposición rusa que sirvió en la KGB y luego en su agencia sucesora FSB, dijo que los agentes de GRU se referían a sí mismos como los “tipos rudos que actúan”.
“¿Nos necesitan para golpear a alguien? Le daremos una paliza ”, dijo. “Necesitamos que agarremos Crimea? Agarraremos a Crimea. ”
En los Estados Unidos, el GRU es quizás mejor conocido como la agencia que abrió el camino en la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016, según una acusación de 12 de sus oficiales en julio obtenida por el abogado especial Robert S. Mueller III.
Pero las entrevistas y los registros públicos en Rusia muestran que su alcance se extiende a los campos de batalla de Ucrania y Siria y a las aulas escolares en Moscú, lo que refleja el enfoque múltiple que Putin está asumiendo en su conflicto con Occidente.
“Putin se ha sentido más cómodo con el riesgo”, dijo Andrea Kendall-Taylor, ex oficial de inteligencia nacional de Estados Unidos. “El GRU se ajusta a su momento”.
GRU en el aula
El poder de la GRU se ve reforzado por un aumento en el apoyo público al ejército de Rusia y sus agencias de inteligencia, un enfoque en el patriotismo y el conflicto con Occidente, que es un tema recurrente en los medios estatales. El propio GRU, según muestran los registros, ahora participa en la promoción de los servicios de inteligencia en las escuelas públicas.
Yevgenia Loguntsova, la madre de Nina, la estudiante de las clases vinculadas con el ejército, escuchó historias de horror cuando era joven sobre los servicios de inteligencia soviéticos. Su madre le advirtió que la policía secreta podría detener a personas en la calle, simplemente por sospecha de faltar al trabajo.
Después de la caída de la Unión Soviética, dijo Loguntsova, el miedo dio paso al ridículo y al disgusto. Muchos rusos habituales vieron que las agencias sucesoras de los servicios de seguridad soviéticos se enredaban en la corrupción.
Pero para 2015, la percepción de Loguntsova de los servicios de inteligencia rusos había cambiado. Los mejores y más brillantes de Rusia ahora se unen a los servicios, dijo. Y vio que las ramas de la inteligencia combatían la corrupción en lugar de tomar parte en ella.
Ella inscribió a su hija en una “clase de cadetes” que contaba con los mejores maestros de la escuela, dijo Loguntsova, y proporcionó lecciones adicionales de matemáticas e informática.
Los documentos publicados en el sitio web de la escuela muestran que la clase está patrocinada por el Servicio de Seguridad Federal, el nombre formal del FSB, y por la Unidad 26165 del ejército, el ala de guerra cibernética de la GRU que también ha sido llamada APT28 o Fancy Bear por investigadores estadounidenses.
La Unidad 26165 ha ayudado a diseñar el plan de estudios en la escuela de Nina Loguntsova y al menos en otras seis en Moscú en los últimos años, según muestran los “acuerdos de cooperación” publicados en los sitios web de las escuelas.
Sin embargo, la unidad parece funcionar en gran parte en el fondo.
Nina Loguntsova y su madre sabían sobre la participación del FSB pero no sobre la participación del GRU. La escuela de Loguntsova no respondió a una solicitud de comentarios. El departamento de educación de Moscú y el FSB declinaron hacer comentarios.
El acuerdo de cooperación entre los servicios de seguridad y la escuela de Loguntsova está firmado por el comandante de la Unidad 26165, Viktor Netyksho. Fue nombrado en la acusación de julio, acusado de liderar el esfuerzo de GRU para piratear las cuentas de correo electrónico de los funcionarios de la campaña demócrata y de Clinton.
“Los conceptos de patria y patriotismo abarcan todo”, dijo el anciano Loguntsova, de 43 años, psicólogo. “No podemos amar a nuestra madre patria y no respetar a estas mismas organizaciones”.
Ucrania como campo de pruebas
Según los analistas, el conflicto de Ucrania proporcionó el banco de pruebas para las operaciones de información y de guerra cibernética de GRU.
Según la agencia de inteligencia occidental, los espías dirigidos por la Unidad 54777 crearon personas falsas y publicaron comentarios en las plataformas de medios sociales en ruso e inglés, así como en artículos en publicaciones occidentales. A menudo, trataron de avivar las divisiones entre los ucranianos pro-rusos y pro-occidentales representándose a sí mismos como “patriotas” ucranianos hartos de los “nazis” y “fascistas” a favor de Moscú, a quienes culparon por la violencia.
En diciembre de 2015, los piratas informáticos de GRU hundieron a unas 225,000 personas en la oscuridad luego de obtener acceso a la red eléctrica de Ucrania, de acuerdo con analistas de inteligencia y del sector privado de EE. UU. Fue el primer ataque cibernético conocido que provocó un corte de energía.
Las unidades de GRU también son sospechosas de implementar un virus informático altamente perturbador denominado NotPetya, dijeron analistas. Lanzado el 28 de junio de 2017 – Día de la Constitución de Ucrania – el virus borró los datos de las computadoras de los bancos, empresas de energía, altos funcionarios del gobierno y un aeropuerto en Ucrania.
También afectó a las computadoras en Dinamarca, India y los Estados Unidos. La Casa Blanca lo llamó “el ataque cibernético más destructivo y costoso de la historia”.
En respuesta al virus NotPetya y otras sospechas de piratería, en marzo, Estados Unidos impuso sanciones a seis funcionarios de GRU.
“Ucrania es para la guerra híbrida del siglo XXI lo que España fue en la década de 1930 para las técnicas de batalla del campo de batalla: el lugar donde los malos prueban lo que pueden usar contra nosotros más adelante”, dijo Daniel Fried, un antiguo funcionario del Departamento de Estado que ayudó Dirigir la respuesta de Occidente a la agresión de Moscú contra Ucrania.
Rusia ha negado que el GRU se involucre en actividades malignas en todo el mundo. Después de que Mueller acusara a 12 oficiales acusados ??de interferir en las elecciones de Estados Unidos, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo que “se ha convertido en la norma en Washington promover noticias falsas e iniciar procedimientos penales con propósitos políticos obvios”.
El abrazo de Putin
En un libro sobre la agencia, el desertor soviético de GRU, Vladimir Rezun, cita una orden del zar en un cuento popular ruso para describir la misión que a menudo se les da a los oficiales: “¡Vaya, no sé dónde! Tráeme algo, ¡no sé qué!
El punto de Rezun, como han hecho eco los expertos en las agencias de inteligencia rusas, es que los agentes de GRU buscan oportunidades para darle al Kremlin lo que creen que quiere sin seguir siempre órdenes precisas.
Pero para este otoño, el GRU parecía haber ido demasiado lejos.
En julio, 12 oficiales fueron procesados ??en Washington. En septiembre, funcionarios británicos acusaron a dos oficiales de GRU del torpe intento de asesinar al ex agente de GRU Sergei Skripal a principios de este año. En octubre, los Países Bajos dijeron que los oficiales de GRU habían intentado piratear una red WiFi internacional de vigilancia de armas químicas estacionando un automóvil especialmente equipado en el Marriott de al lado.
En noviembre, el GRU celebró el centenario de la fundación de su predecesor comunista bajo el revolucionario León Trotsky. Putin llegó a su sede para la celebración y solo ofreció elogios.