Obama busca diálogo con el pueblo y consenso con oposición en segundo mandato

Obama busca diálogo con el pueblo y consenso con oposición en segundo mandato

(foto AP)

El presidente de EE.UU., Barack Obama, afirmó que durante su segundo mandato, que inició el pasado 20 de enero, su estrategia se centrará en una “conversación con el pueblo” y la búsqueda de consenso con la oposición, según una entrevista divulgada hoy en internet por la revista “The New Republic”.

Durante la entrevista, realizada para la edición impresa del próximo 11 de febrero, Obama habló del clima político en Washington y los retos de su segundo mandato, entre estos la economía, la inmigración, el control de armas y el cambio climático.

“He pasado mucho tiempo tan solo pensando en ¿cómo puedo comunicarme con más eficacia con el pueblo estadounidense? ¿Cómo intento zanjar algunas de las divisiones que permanecen desde hace tiempo en nuestra cultura?”, señaló como ejemplo de los retos de su Gobierno para “vender” las metas de su mandato hasta 2017.





El gobernante reconoció que hay “lecciones que aprender” tanto de otros presidentes a través de la historia, entre estos Abraham Lincoln, como de su primer mandato (2009-2013), que caracterizó como uno de “apagar incendios”.

“Una de las cosas que ocurrió durante el primer término fue que afrontábamos tantos fuegos a la vez que nos centramos en (formular) políticas y hacerlo bien, lo cual quiere decir que pasamos menos tiempo comunicando al pueblo estadounidense” el porqué de esas políticas y su impacto en el deseo de fortalecer a la economía y la clase media, señaló.

Por ello, explicó, toma nota del adagio de Lincoln de que “con la opinión pública (de tu lado), no hay nada que no puedas lograr; sin ella, no llegarás muy lejos”.

Así, Obama dijo que buscará “una conversación con el pueblo estadounidense”, en vez de sólo tratar de influir en el proceso político en Washington.

“Todo lo que hacemos combina una estrategia legislativa con una amplia estrategia de alcance y comunicación para que la gente se involucre, para que no sea Washington por un lado y el resto de EE.UU. por el otro”, resumió.

Obama consideró que fomentar el bipartidismo “será un proceso” porque, tras los comicios de noviembre pasado, “el Partido Republicano aún atraviesa un esfuerzo temprano de reexaminar su agenda” y “aún hay asombro de parte de algunos en el partido porque gané la reelección”.

“No es un momento divertido para ser miembro del Congreso…no creo que el asunto sea si hay o no gente de buena voluntad en ambos partidos para lograr cosas. Creo que lo que realmente tenemos que hacer es cambiar algo de las estructuras de incentivos para que la gente se sienta libre de buscar terreno común”, recetó.

Para Obama, el consenso “no es una mala palabra” y ninguno de los dos partidos tiene “monopolio sobre la sabiduría”, por lo que cree que el clima político cambiará conforme los políticos vean el lado positivo de la cooperación.

“Ahora mismo ese no es el caso. La opinión pública será lo que cambie eso”, insistió.

La mayoría de los temas más apremiantes de EE.UU. en los próximos 30 o 40 años son “complicados y requieren decisiones difíciles”, pero “no hace falta ser un genio” para resolverlos, dijo.

En ese sentido, Obama sostuvo que para corregir la marcha de la economía se requerirá un mejor sistema educativo, inversiones en investigaciones y en la infraestructura, reducción de los costos de salud y un aumento en las exportaciones.

Además, su Gobierno, continuó, tiene “un buen sentido” de cómo corregir el maltrecho sistema de inmigración y, respecto al cambio climático, ya existen “herramientas para empezar a revertir eso”, aunque aún se necesitará “un gran avance tecnológico”.

Para Obama, la clave para resolver los retos de EE.UU. yace en movilizar la “voluntad política para actuar”.

Preguntado sobre la resistencia al control de armas por parte de los republicanos y demás defensores de su tenencia, el mandatario señaló que, en general, los republicanos representan distritos altamente conservadores y, por lo tanto, “quizá no se sienten obligados a poner atención a una opinión pública más amplia”.

Su desafío, subrayó, es persuadir a los republicanos a que trabajen con su partido en la búsqueda de terreno común, si bien asuntos como los derechos de los homosexuales pueden causar grandes divisiones internas dentro del Partido Republicano. EFE