Señalan a mujer de matar a su concuñada a cuchilladas

Olga Castro y Lusvelia Gutiérrez están consternadas por el crimen.Foto: Daniel Olivares

La cocinera del restaurante de Chafa, Belkis Gutiérrez Castro, de 33 años, fue ultimada al filo de la medianoche del sábado de una cuchillada en cada costado y otra en una axila, cuando al parecer tomaban licor frente a su casa, en la segunda calle del sector Santa Rosa en Lechería, informa El Tiempo.

Como supuesta homicida sindican a Pierina Vásquez, de unos 30 años, quien, según la versión de unas primas de la fallecida, a principios de enero de este año le advirtió a Belkis: “Yo te voy a sacar de aquí, de Santa Rosa, sea como sea”.

Las parientes, quienes prefirieron mantenerse en el anonimato, contaron que la trabajadora le había restado importancia a la  amenaza proferida por  su concuñada, quien no disimulaba la antipatía que sentía por ella, pese a que vivían bajo  el mismo techo.





“Tras herir a Belkis, Pierina dejó el cuchillo, y huyó a pie”.

Las primas indicaron que las hermanas Luz Marina Salazar y Francis Salazar trasladaron a su amiga Belkis al Centro de Diagnóstico Integral (CDI) Alberto Lovera, pero estaba cerrado.

Señalaron que unos agentes supuestamente les pidieron 100 bolívares para auxiliar a la moribunda que se desangraba en la vía.

Lo cierto es que los funcionarios de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui)  llevaron a Belkis Gutiérrez al hospital Luis Razetti de Barcelona, pero ya estaba muerta.

Una fuente dijo que los oficiales de Polianzóategui y de la Policía Municipal de Urbaneja andan tras la pista de Pierina Vásquez.

Justicia

Frente a la morgue del  Razetti, la estudiante de refinación Lusvelia Gutiérez contó que dormía en su domicilio de Puerto La Cruz cuando la despertó a las 2:00 am de ayer el repicar de su teléfono.

A esa hora la llamó una prima, cuyo nombre omitió, para avisarle que habían acuchillado a su hermana Belkis, dijo.

Lusvelia refirió que Belkis nació en Bergantín, y llevaba 14 años residenciada en Lechería. Apenas llevaba un año conviviendo con un mesonero llamado Luis.

“Ambos residían en una casa junto con Miguel, un obrero de la construcción que es hermano de Luis, y su mujer Pierina Váquez, la presunta homicida”.

Gutiérez exigió justicia, pues su hermana Belkis tuvo tres hijos de 11, 9 y cuatro años con su exesposo el comerciante Rafael Sosa.