Angel Rangel: AH1N1 y la información preventiva

Angel Rangel: AH1N1 y la información preventiva

Muy recientemente, en vista de la negativa de la Ministra de Salud de Venezuela de autorizar la publicación de cifras relacionadas con la epidemia actual de influenza A(H1N1),  nuevamente se escucharon (entre muchas otras) las voces de dos calificados especialista en el área de la salud pública, como son los Doctores José Feliz Oletta y Rafael Ángel Orihuela, exigiendo su divulgación para que el país conociera en detalle la magnitud de la epidemia y las medidas que en consecuencia serian implementadas a nivel nacional por parte del ente rector.

No tengo la menor duda de cuán importante resulta en las actuales circunstancias el contar con la información mencionada, pero también deseo añadir al reclamo, el aspecto vinculado a la falta de información para el “antes”, es decir la información que se debe planificar (antes) para ser implementada (durante) con carácter educativo y orientador, a fin de comunicar a los ciudadanos, por todos los medios posibles, las medidas que serán puestas en práctica para evitar la diseminación de la epidemia y la reducción de sus causas y efectos.

Resulta inexplicable,  que un gobierno que tiene a su disposición el uso discrecional del espectro radioeléctrico (el cual utiliza frecuentemente para difundir actividades en cadenas de radio y televisión) y que adicionalmente cuenta con cientos de medios de comunicación oficiales y comunitarios, no se haya dado a la tarea de planificar e implementar una campaña masiva de información y comunicación, para explicar las principales medidas preventivas de carácter colectivo a las cuales se debe recurrir en la anticipación a posibles situaciones de emergencia o catástrofes, y donde de manera clara, sencilla, oportuna, comprensible y veraz, se comuniquen las recomendaciones y las acciones  implementadas.





El promover con videos, folletos, afiches, etc., medidas de aseo diario en la población, el explicar las mediadas tomadas en centros de salud, educacionales, de trabajo y otros de uso público; así como el dar a conocer las disposiciones especiales para grupos de mayor vulnerabilidad como lo son los niños, las personas mayores, las mujeres embarazadas, u otros  pacientes inmunodeprimidos o con enfermedad crónica, además de generar confianza y credibilidad en el publico, serian de gran ayuda para evitar el pánico, la ansiedad y la creciente preocupación que la situacion ha despertado en todos los ciudadanos.

@Angelrangels