Las intensas jornadas de trabajo, la integración de la mujer en el mercado laboral y la longevidad, especialmente femenina, han dado lugar a una nueva estructura de los hogares en el siglo XXI, sobretodo en países ricos como Suiza, donde cada vez más personas viven solas y tienen menos hijos,EFE.
En el país helvético, más de dos terceras partes de los 3,5 millones de hogares están compuestos sólo por una persona en el 36,4 por ciento de los casos, por dos en el 32,4 por ciento, según los últimos datos estadísticos ofrecidos por el gobierno suizo.
“En los últimos diez años el tamaño medio de los hogares se ha reducido de un 2,29 a un 2,21 por ciento”, explicó Christoph Freymond, representante de la Oficina Federal de la Estadística en Suiza.
Actualmente, los hogares de mayor tamaño son raros: el 13,3 por ciento están formados por tres personas, el 12,2 por ciento por cuatro personas y sólo el 5,7 por ciento tienen cinco o más miembros.
“Creo que fundamentalmente los suizos son muy individualistas, la satisfacción individual pesa antes que lo colectivo o comunitario”, señaló a Efe Beatriz Atencio, intérprete independiente panameña de 54 años, que vive en Suiza sola desde el año 2012 cuando su hija se independizó.
“La independencia laboral y económica hace que cada vez un mayor número de personas vivan solas”, afirmó Cristina Cubas, contable hondureña de 59 años que vive y trabaja en Suiza desde hace más de treinta años y forma una familia de una sola persona desde 1986.
Freymond explicó además que la mayor parte de las personas que viven solas suelen tener más de cincuenta años y que esta situación se agrava a partir de los 65.
“Por el contrario, son los jóvenes los que con frecuencia viven en hogares de tres o más personas”, agregó Freymond.
Por otro lado, el fenómeno de la soledad en el hogar es más frecuente en el caso de las mujeres, que tienen una mayor esperanza de vida.
“El hecho de vivir solo es femenino porque las mujeres son más longevas. La diferencias por sexo son más acusadas a partir de los 64 años. De hecho, a partir de los 80 años, el 67 por ciento de los hombres viven en pareja mientras que esto ocurre sólo en el 28 por ciento de las mujeres”, expuso Freymond.
Atencio opinó que quizás las mujeres lleven mejor que los hombres vivir solas y “puede que éstos hagan muchas concesiones con tal de no vivir solos”.
Por otra parte, en Suiza las parejas sin niños representan algo más de un cuarto de la población -27,9 por ciento-, casi el mismo porcentaje que las parejas con hijos -26 por ciento-.
“La falta de estructuras sociales como guarderías a precios abordables y la poca flexibilidad de los horarios de trabajo son las razones por las que las parejas deciden cada vez más no tener hijos”, aseguró Cubas.
“La familia nuclear y pocos hijos tienen una relación directa con la disponibilidad de estructuras que faciliten el trabajo de las mujeres”, argumentó Atencio.
“Está claro que los hogares continuarán mermando, incluso más rápidamente de lo que hemos podido observar en los últimos años”, sentenció Freymond.