Las dos Coreas fracasan en su quinto encuentro para reabrir Kaesong

FOTO KOREA POOL / AFP

Representantes de las dos Coreas concluyeron hoy con un nuevo fracaso su quinto encuentro este mes enfocado a reabrir el complejo industrial de Kaesong, por lo que se reunirán de nuevo el jueves, informó una portavoz del Ministerio de Unificación de Seúl.

Los tres delegados del Sur y tres del Norte que se citaron en la ciudad fronteriza norcoreana de Kaesong “finalmente tampoco han logrado llegar a un acuerdo” sobre la reapertura del complejo, por lo que se verán las caras de nuevo el jueves 22, indicó a Efe la portavoz de Seúl.

En las cuatro reuniones anteriores, celebradas los pasados días 6, 10, 15 y 17 de julio, los representantes de las dos Coreas tampoco lograron superar sus diferencias, por lo que las negociaciones no han mostrado hasta ahora progresos visibles.





El Sur ha reiterado en todos los encuentros su postura inamovible de exigir medidas de salvaguarda para prevenir un nuevo cierre unilateral como el producido el pasado abril, cuando el Norte retiró a sus 54.000 trabajadores como parte de una intensa campaña de hostilidades en plena etapa de tensión.

Además, Seúl mantiene que, para reabrir Kaesong, es necesario que Pyongyang acceda a crear un marco institucional para proteger a las empresas y a internacionalizar el complejo con el fin de que inviertan empresas de otros países, lo que otorgaría mayores garantías a los empresarios.

Corea del Norte, por su parte, ha exigido la reapertura del polígono industrial conjunto cuanto antes y sin condiciones previas.

Con esto, las dos Coreas han mostrado una vez más que sus respectivas posturas permanecen invariables, lo que plantea difícil que puedan alcanzar un acuerdo a corto o medio plazo para reabrir el que hasta su cierre en abril era el único proyecto conjunto vigente entre ambos.

El cierre del complejo sigue traduciéndose en pérdidas por valor de más de 900 millones de dólares para las empresas surcoreanas, mientras el Gobierno del Norte ha dejado de percibir varios millones de dólares en deducciones de los salarios de sus obreros.

Kaesong, que operó de manera casi ininterrumpida desde su apertura en 2005 hasta su cierre en abril, albergaba 123 empresas de Corea del Sur, que fabricaban productos aprovechando la mano de obra barata -unos 130 dólares al mes- de los empleados del Norte. EFE