Giusti: Venezuela es un país que te obliga a tomar una posición política

Giusti: Venezuela es un país que te obliga a tomar una posición política

Fernando del Rincón entrevista (parte II) en Conclusiones a los periodistas María Elena Lavaud y Roberto Giusti, quienes presentaron su renuncia a la televisora Globovisión, luego del cambio de dueño en mayo de este año, por estar en desacuerdo con la nueva línea editorial del canal.

Preguntados sobre tienen respaldo del Colegio Nacional de Periodistas (CNP) o que si ha existido algún pronunciamiento de su parte, Giusti respondió “No se que papel juega el CNP en esta situación”.





Mientras que Lavaud reveló “Ayer se comunicó conmigo el CNP seccional Caracas, está haciendo una investigación. Hará pronunciamiento como debe ser, de hecho me hizo saber que al salir nosotros del canal, los periodistas que se quedaron han pedido reunión con la directiva de Globovisión, porque están preocupados”.

¿Globovisón una ventana opositora?

Preguntados sobre si Globovisión se convirtió netamente en una ventana de la oposición, Lavaud dijo “En un canal los periodistas no pueden convertirse en activistas políticos, creo que eso forma parte de los errores que cometimos. Pero esto pasa por el sistema político venezolano”.

Por su parte Giusti recalcó “Venezuela es un país que te obliga a tomar posición. Hay un intento concreto de que ese ataque contra los medios críticos se convierta en hegemonía comunicacional, uno tiene que salir en defensa de la democracia. No te pueden exigir que seas objetivo, que expreses equilibrio, creo que en cuanto a la defensa de la democracia soy totalmente subjetivo”.

Interrogados sobre que pesa más en este caso, ser periodista o ser venezolano, los comunicadores reflexionaron. Lavaud dijo “Es el gran dilema. En muchas ocasiones nos ha tocado ser primero venezolanos. Estamos en una situación comprometida. No tendría que ser así”.

Mientras que Giusti comunicó “Yo soy un periodista venezolano. Que hasta la mitad de su carrera vivió en un país aburrido. Eramos felices y no lo sabíamos. Sabíamos que iba a ocurrir. Todo era certidumbre y previsión de lo que iba a suceder. A partir del triunfo de Chávez entra la era de la incertidumbre, violencia, un tiempo que la democracia no puede aguantar”.