Tras la detención del alcalde de la ciudad de Valencia, Edgardo Parra Oquendo (Psuv) la sede del Sebin donde se encuentra recluido se ha convertido en un repentino lugar de peregrinación de militantes chavistas en su mayoría provenientes de los barrios pobres de la capital carabobeña.
Con información de ÚltimasNoticias – Gustavo Rodríguez
Algunos incrédulos llegan para corroborar lo que se comenta en los consejos comunales y otros enojados por lo que califican de componenda no dejan de expresar su solidaridad con el encarcelado burgomaestre. “Esa cacareada alianza perfecta no es más que otro engaño a las bases chavistas.
Como le retiraron el apoyo a Edgardo (Parra) saben que van a perder Valencia y ahora intentan justificar la metida de pata. Los peluches andan asustados y usando todo el poder del estado para perjudicar a nuestro alcalde”, dijo la señora Yasmín Carrasco, miembro del consejo comunal Patria Nueva de la parroquia Miguel Peña.
“Hasta hace una semana era un Dios y ahora es un demonio. Este pueblo ya no se chupa el dedo. Los que lo acusan al alcalde viven junto con los burgueses en Altos de Guataparo (urbanización exclusiva), pero Edgardo Parra sigue viviendo en la misma casa de siempre”, señaló Juan José Martínez, también vecino de la parroquia Rafael Urdanelta. La mayoría de los chavistas que llegan a la sede de la Brigada Territorial del Sebin en el municipio Naguanagua lo hacen en vehículos de las rutas troncales.