Los costarricenses votan este domingo para elegir presidente en unos inciertos y apretados comicios, con la derecha en el gobierno y una izquierda emergente como favoritos entre cuatro candidatos que se disputan dos plazas para una probable segunda vuelta.
Unos 3,1 millones de electores están llamados a las urnas para designar al sustituto de Laura Chinchilla, la primera mujer presidenta en la historia de Costa Rica, y a un Congreso de 57 diputados, para los próximos cuatro años, en una jornada que arranca a las 06H00 locales (12H00 GMT).
Johny Araya, alcalde de San José por más de dos décadas, aspira a sus 56 años, tras toda una vida en la política, lograr para el Partido Liberación Nacional (PLN), agrupación socialdemócrata que viró a la derecha, el tercer periodo consecutivo.
Sus aspiraciones se ven seriamente amenazadas, según los sondeos, por el diputado y ecologista de 36 años José María Villalta, de la agrupación Frente Amplio (FA) que por primera vez le da a la izquierda opción de triunfo en la conservadora Costa Rica.
Siguen muy de cerca el historiador Luis Guillermo Solís, de 55 años, del Partido Acción Ciudadana (PAC, centro), y el empresario Otto Guevara (53), del Movimiento Libertario (ML, derecha).
Pero cerca de un 30% de los votantes están indecisos, de acuerdo con las encuestas, y la atomización de preferencias hace que ninguno de los candidatos se acerque al 40% necesario para ganar el domingo, lo que presagia una segunda vuelta el 6 de abril.
“Con ese panorama no es posible asegurar nada con certeza. Hay un 75% de posibilidades de segunda ronda, pero todavía hay un margen para que Araya termine saltando con dificultades la barrera”, advirtió a la AFP el sociólogo y analista Manuel Rojas.
Tras una campaña de poco entusiasmo en las calles, pero candente en las redes sociales y en los debates en los medios, la noche previa a la votación simpatizantes de los partidos tomaran varios puntos de San José, ondeando banderas.
AFP