El 19 de Abril de 1810, mientras Caracas ansiaba por otro rey, su juventud soñaba con la verdadera Libertad. Pasados doscientos dos años, se repite la historia: viles lacayos de una fuerza extranjera luchan por mantener su status quo, oponiéndose a la juventud venezolana que quiere ser verdaderamente libre.
La resistencia que los estudiantes y los jóvenes llevan adelante, ha servido para unir a todos los venezolanos por la defensa de su Nación: la causa es Venezuela, su Libertad y Soberanía. Y en torno a ese fenómeno, se ha decretado el fin de una era para dar comienzo a una Nación diferente. Una verdadera UNIDAD ha nacido.
El pueblo sabe que el mal se impondrá si los hombres de espíritu noble huyen de su destino, sobretodo en momentos como este cuando la moral de la Nación está siendo humillada. Cada miembro de esta sociedad que posea un alto concepto de justicia y amor propio tiene que defenderse para mantener su dignidad, pues la indiferencia también demostraría qué tan bajo se puede caer.
¿De qué debemos defendernos? preguntan algunos cuyo sentido de trascendencia se ha visto disminuido. La respuesta es muy simple: del castro-comunismo. Tal como en 1810 tuvimos que emprender una lucha a muerte para conquistar nuestra Libertad saliendo del yugo de un poder monocrático y extranjero, hoy tenemos que unirnos para reconquistarla después de que las clases dirigentes tanto del gobierno como los de “oposición” esclavas de la ideología marxista, nos la quieren quitar con represión y violencia. En esta lucha, hemos finalmente desenmascarado a quienes están en el poder y a sus cómplices “opositores”, haciendo ver cómo han desvirtuado a la Democracia y la Libertad, instaurando un proceder político que, se basa en el odio entre las clases sociales y criminaliza la verdadera disidencia política, rebajando a la Libertad a una concesión que estos usurpadores otorgan a cambio de obediencia.
Nosotros hemos demostrado que no se debe bajar la guardia cuando se está conquistando la Libertad. No lo hacemos ahora y no lo haremos mientras existan intereses dentro y fuera de nuestro país que consideran a Venezuela como su más fructífero feudo. Somos incómodos para todos los que quieren a Venezuela esclava. Es por eso que quieren y necesitan destruir nuestra felicidad y nuestra seguridad, arrastrándonos a una condición de miseria indigna para todo ser que se considere persona.
Solo están condenados los hombres que no están dispuestos a aprender de su pasado porque olvidan su historia: nosotros sabemos muy bien porque Venezuela está así y por eso somos firmes en nuestras posturas.
Los que se niegan a percibir la realidad con crudeza, pronto entrarán en razón. La Resistencia ha demostrado cual es el camino para nuestra Patria y que es lo que queremos los venezolanos. No permitimos que vasallos de una cultura ajena y decadente como la del comunismo intenten dominarnos.
Nosotros, conquistaremos la independencia instaurando una verdadera Democracia, aquella que respete y valore a la persona. Esta Democracia prosperará en un sistema político diferente a éste, aquel donde su principal Valor será el que motivó a todo un pueblo a derrotar la opresión: la Libertad.
Es por ello que considero con más vigencia la “carta al venezolano libre” que escribí el 2 de Enero de este año http://goo.gl/6DBTih.
La resistencia tiene un plan para liberar a Venezuela. Lo llevamos adelante los jóvenes y los estudiantes en conjunto.
Confíe en sus hijos.
Libertad o nada.
Roderick Navarro