El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva defendió hoy en el estado de Sao Paulo la política económica de su sucesora y candidata del Partido de los Trabajadores (PT) para las elecciones de octubre, Dilma Rousseff, y dijo estar “tranquilo” con el crecimiento del país.
De acuerdo con el exmandatario, la economía nacional sufre con el ritmo del comercio mundial y con la baja inversión a nivel interno, la cual, dijo, está siendo combatida por el Gobierno con la puesta en marcha de obras.
“Tuvimos una crisis mundial que hizo a el comercio del mundo disminuir y tenemos el problema de la inversión interna y ya fueron anunciadas obras, ya tenemos millones de reales colocados (…) Estoy muy tranquilo con el crecimiento de Brasil”, afirmó Lula en Praia Grande, en el estado de Sao Paulo, en declaraciones recogidas por el diario Folha de Sao Paulo.
Este martes, el Gobierno brasileño redujo su proyección para el crecimiento económico este año desde el 2,5 % calculado hace dos meses hasta el 1,8 %, una cifra más optimista que la de los analistas del mercado financiero, que esperan una expansión del 0,97 % en 2014, según un informe publicado el lunes.
En un discurso pronunciado en un encuentro con trabajadores del sector químico, Lula defendió a Rousseff y afirmó que “como toda mujer, es brava”.
“Tenemos que levantar la cabeza y hacer una reflexión profunda para saber que el país tiene que continuar caminando hacia adelante y por eso no tengo ninguna preocupación. Conozco a Dilma. Pocas veces conocí en este país alguien con el carácter y firmeza de Dilma”, comentó. EFE