La Resistencia es un movimiento social venezolano sui generis, que junta a la población en torno al ideal de la Libertad y la Soberanía de Venezuela. Su espontanea presencia ha sido su valor agregado más exitoso, porque resguarda –en la medida que se puede- la seguridad de los que se identifican con ella desde sus distintos roles: académicos, intelectuales, protesta, comunicadores, grupos de primeros auxilios, artistas, y activistas políticos.
NO creemos en la MUD como oposición real del régimen. Muchos de los que pertenecimos a algún partido político descubrimos que son iguales a lo que estamos combatiendo, por sus principios y valores y porque tienen la misma raíz ideológica que el PSUV. Asimismo, muchos que creían en el PSUV y sabiendo que cometieron un error en el tiempo, han unido sus esfuerzos en esta lucha. Esto ha generado un fenómeno unificador: sin importar su origen social, sin importar si apoyó a la MUD o al PSUV, nos unimos para salvar a Venezuela.
El problema de Venezuela es cultural. Lo político es una expresión de ello.
En ese sentido hemos determinado que el sistema político actual es decadente. Las dos caras de la moneda de ese sistema son los que están en el poder (PSUV) y los que oficialmente “se le oponen” (MUD). Ellos han sido los grandes promotores del marxismo cultural, que es una forma baja de existir, antinatural, de valores hacedores de hombres obedientes, corrompidos y esclavos necesarios para justificar su negocio clientelar en la política venezolana. Hablan en nombre del pueblo en favor de la igualdad, el mito del progreso, la justicia social, la democracia ilimitada y conciben naturalmente al hombre como malo.
La Resistencia es un movimiento político-cultural que ha desmontado los argumentos que han mantenido esa farsa durante más de 50 años y que son la causalidad de la destrucción de Venezuela. Hemos dicho que la Libertad está por encima de las caducas ideologías políticas venezolanas, todas de izquierda, por eso la corriente de pensamiento político que promovemos se enmarca en ella. No todos somos iguales: unos se esfuerzan más que otros y todos somos lo que nos impulsa la fuerza de existir. No existe Democracia en Venezuela, por eso la salida a este conflicto NO es electoral en cualquier forma. La clase política venezolana no está a la altura de las aspiraciones de Venezuela y por eso, no merecen gobernarnos. Hemos dicho que el Estado debe redimensionarse y entre esas cosas, no debe controlar la economía. Queremos que se vayan los cubanos comunistas y las FARC de nuestro territorio y recuperar la Soberanía. Promovemos la excelencia y el mérito como herramientas para hacer grande al país y hacerlo florecer.
No hay medios de comunicación. Nuestras redes internas son el mecanismo más fuerte porque generan una interacción de tú a tú con la población. En la comunidad internacional hemos hechos ingentes esfuerzos para difundir el renacimiento de nuestra civilización en función de hacer frente al comunismo en su intento por hacer pobre a los pueblos de América.
Reivindicamos la protesta de calle: TODOS tienen derecho a demostrar que no nos calamos más vivir en esta situación.
Por eso, desconocemos a la MUD y al PSUV. Desobedecemos las reglas de juego político que proponen, todas electoralistas. El artículo 350 de la constitución hace legal nuestra actitud frente a la decadencia, y el derecho natural a rebelarnos ante la opresión hace legítima nuestra protesta.
Únete a la Resistencia: el cambio es irreversible.
Libertad O Nada
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