El suceso ocurrió cerca de las 5:00 am de este viernes, en la residencia del trabajador del volante, situada al final de la calle Montalbán, en la parte alta del sector La Torre del barrio porteño Campo Alegre.
A las 8:40 de la mañana, detectives del Cicpc llevaron los restos del taxista a la morgue del hospital Luis Razetti de Barcelona.
En el anfiteatro forense los médicos le observaron una herida de bala en un brazo que le entró por el costado izquierdo.
El deceso de Rodríguez causó malestar y dolor a sus vecinos y parientes, incluidos sus hermanos el taxista Pedro Rodríguez y el comerciante Oswaldo Rodríguez, quienes demandaron justicia.
En Campo Alegre se quedaron las comisiones de apoyo de Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) y de la Policía Municipal de Sotillo (Polisotillo) para resguardar la escena del crimen.
En medio de la rabia, una patrulla de Polisotillo fue retenida por habitantes de la comunidad que exigían la presencia de los representantes de los medios de comunicación para exponer su versión de los hechos.
A una cuada de la referida vivienda, bajo una mata de siempreverde, residentes reportaron supuestos excesos policiales.
Afirmaron que funcionarios halaron por los cabellos y golpearon al ama de casa Lisette Sánchez, de 31 años, quien sufre de epilepsia. Además, la retuvieron junto con una sobrina del Luis, Alneli Rodríguez (35), aunque después, ambas fueron puestas en libertad.
El ama de casa Yanetzi Lara y la empanadera Claudina Morán aseveraron que los policías lanzaron bombas lacrimógenas y efectuaron disparos, sin importarles que hay niños y ancianos en la comunidad.
El taxista Alfredo Carrión aseguró que los oficiales violentaron el portón, la reja, la puerta principal y la del patio, para ultimar a su tío Luis Rodríguez en el porche de su vivienda.
El comerciante Alberto Márquez manifestó que en Campo Alegre se presentó un jefe del Cicpc, cuyo nombre ignora, quien, al parecer, admitió que los policías realizaron un mal procedimiento.
“Los oficiales buscaban a presunto violador apodado “el morao”, pero mataron a Luis que no se metía con nadie”.
Todos dieron fe de que Rodríguez era fundador del sector La Torre de Campo Alegre, donde residía con su esposa Santa Moya, con quien tuvo dos hijos que se independizaron.
Afirmaron que el taxista era trabajador y servicial, “en fin un pan de Dios”.
Versiones contradictorias
Un vecino que no se identificó, relató que Rodríguez se molestó y protestó porque los funcionarios del Cicpc, sin orden de cateo, le allanaron su casa. “Esto bastó para que un detective le segara la vida de un disparo.
El Tiempo trató de conocer la reacción del jefe del Cicpc en Oriente, comisario Lisandro Alfonzo, aunque no fue posible contactarlo.
Extraoficialmente se supo que una comisión del Eje de Homicidios de la sub-delegación portocruzana de ese cuerpo se trasladó a la barriada Campo Alegre, con una orden de allanamiento emanada por el Juzgado de Control N° 3, para buscar a un individuo apodado “cheo psicópata.”
Se conoció que los policías apresaron al sujeto, unos vecinos formaron un alboroto y el hombre escapó. Al parecer, un oficial confundió a Luis Rodríguez con el fugitivo, y lo mató. Otra especie indica el funcionario le disparó al taxista porque supuestamente defendió a “cheo el psicópata”.
Tras ser notificado del caso, el fiscal XIX del estado Anzoátegui con competencia en derechos fundamentales, Ernesto Cova, presenció ayer en la morgue del Razetti la autopsia practicada Rodríguez.
Luego, el representante de la vindicta Pública se trasladó a la comunidad para inspeccionar el sitio del suceso.
Estilo Rambo
La obrera de mantenimiento Ana Ratia contó que se despertó ayer con las detonaciones, unas 20, y salió de su hogar ver qué pasaba en la calle Montalbán del barrio portocruzano Campo Alegre. Un ama de casa treintañera expresó que los oficiales parecían Rambo: echaban tiros con escopetas y otras armamentos. De seguidas, otra señora mostró una cartucho calibre 12 y dos vainas de balas.
Vía: Eltiempo.com.ve