Anarquía revolucionaria por @jorgebarrosod

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“Falta de todo gobierno en un estado”, “Ausencia de poder público”, “Desconcierto”, “incoherencia” o “barullo”, son solo algunos de los significados de “anarquía” en el Diccionario de la Real Academia Española; y cualquier parecido con Venezuela, no es tontería.

Vivimos en un país sin reglas claras, donde pareciera que la única ley la impone el más vivo, el enchufado o el desalmado. Donde la flaqueza de autoridad alimenta el caos y la conformación de grupos armados, al margen de cualquier legislación. Los 5 Estados parapoliciales, como los denomina el criminólogo Fermín Mármol García. Y eso tampoco es tontería.





La realidad es que la anarquía reina en Venezuela, y lo peor es que es insostenible. Solo la sensación de inseguridad, como llaman los revolucionarios a la violencia desbordada en nuestro país, cerró 2014 con casi 25 mil asesinatos, 90% de ellos sin castigo. Un escenario dramático, incoherente y desconcertante. Consecuencia pura de la falta de gobierno en nuestro país.

Ha sido la anarquía la que ha permitido que la impunidad se imponga en el día a día de la sociedad venezolana; y la impunidad la principal causa del aumento de la criminalidad, corrupción y desorden en la nación. Y es que mientras no haya sanción para el delito, los antisociales seguirán sintiéndose con el permiso de hacer a sus anchas, porque sin justicia no hay democracia, sin democracia no hay gobierno, sin gobierno no hay orden, y sin orden reina la anarquía.

Como si se tratara de una profesión, el crimen ha invadido parte del tejido social en Venezuela, al punto de convertirse en un problema de salud pública, sin antídoto disponible. Al menos desde el Estado no se hace nada para controlarlo o mejorarlo.

Pero nosotros como pueblo sí podemos combatir la ilegalidad; reconstruir la justicia, la educación y nuestros valores. Alcanzando la mayoría en la Asamblea Nacional acabaremos con la impunidad, la corrupción y la anarquía. Desmantelaremos a los grupos armados que generan violencia política en el país, haremos contraloría a todas las instituciones del Estado para castigar la corrupción, promulgaremos leyes en beneficio del pueblo, renovaremos los Poderes públicos, y abonaremos el camino para el cambio de gobierno que queremos y necesitamos en nuestra amada Venezuela.

Unión y cambio. ¡Por Venezuela vale la pena seguir luchando!