Aunque la propuesta del CNE -que aún debe ser aprobada por la Asamblea Nacional- mantiene inalterados los circuitos utilizados en las elecciones parlamentarias de 2010, sí plantea redistribuir el número de diputados en algunas circunscripciones, incrementando el número de diputados en circunscripciones de dominio oficialista y en detrimento de circunscripciones de dominio opositor.
“No vemos garantía de imparcialidad en el diseño de circuitos. Este es un proceso fundamental presente en toda elección del cual depende la forma cómo se cuentan los votos y cómo se transforma la voluntad popular en autoridades y representantes”, indicó Héctor Briceño, coordinador del Proyecto de Integridad Electoral Venezuela que desarrolla el Centro de Estudios Politicos de la Ucab.
Explica Briceño que uno de los nudos centrales en el proceso de construcción de circuitos es el cálculo de proyecciones de población. “Los desequilibrios poblacionales presentes en los cálculos poblacionales realizados por el CNE están en contradicción con los realizados por el instituto estadístico del gobierno y su efecto parece estar orientado a favorecer al partido gobernante”.
En ese sentido, señala un factor fundamental en el proceso de delimitación de circunscripciones que es el criterio o principio orientador. El objetivo de todo proceso de diseño y construcción de circuitos es lograr una “representación de calidad” que garantice una representación democrática, justa y equitativa.
La forma de operar este criterio en la mayor parte del mundo ha sido utilizar mecanismos de equivalencia poblacional. “En nuestro caso, explica Briceño, el índice poblacional cumple con esa importante función. No obstante, la normativa vigente no sugiere ningún límite o freno a la distorsión, esto es, cuánto puede desviarse o alejarse de dicho índice poblacional. De forma tal que encontramos diferencias importantes en la relación entre diputados y población dentro de un mismo estado”.
Refiere el representante del Centro de Estudios Políticos que el proyecto de circunscripciones electorales que trabajan técnicos del Consejo Nacional Electoral estaría diseñado para favorecer al oficialismo, de acuerdo a información publicada en diario El Universal en fecha 14 de abril. La propuesta disminuiría el número de diputados electos en la circunscripción 2 del estado Miranda, la lista del Distrito Capital y otros circuitos que históricamente han votado a favor de la oposición.
También se modificaría el número total de diputados a la Asamblea Nacional, que pasaría de 165 a 167 integrantes. Antes de ser aprobado, la AN debe aprobar los índices poblacionales del Instituto Nacional de Estadística, que sirven de base a las modificaciones, y ser votado por la mayoría de los rectores del CNE.
Elecciones sin fecha definida
Por otro lado, hasta el momento el CNE, único responsable de esta tarea, sigue sin anunciar la fecha de las elecciones parlamentarias. Distintos actores han pedido al ente comicial anunciar la fecha y el cronograma de este proceso, entre ellos los partidos políticos y asociaciones civiles han hecho sucesivos llamados al CNE para que defina y anuncie la fecha de las elecciones.
“La necesidad de realizar elecciones parlamentarias en 2015 es ampliamente conocida, lo que no se explica es por qué el CNE atrasa el anuncio de la fecha de realización, restando al proceso confiabilidad, eficiencia, igualdad de condiciones y transparencia. Creemos que Venezuela tiene mucho qué reflexionar sobre la actuación de esta institución que lejos de sumar confianza, parece desestimular la acción del voto que es la base del sistema electoral y la democracia”.
Elegir el Parlatino es un derecho
Ya algunos actores políticos se han pronunciado sobre la solicitud de eliminar las elecciones para escoger diputados al Parlamento Latinoamericano. Desde el Centro de Estudios Políticos de la Ucab consideran al menos política y jurídicamente débil la argumentación presentada por el presidente de la Asamblea Nacional para justificar que el CNE suprima un derecho consagrado de los venezolanos.
“Esta elección de representantes venezolanos ante el parlamento que agrupa a diputados de toda la región está presente en la tradición electoral desde 1999 a través de la Asamblea Constituyente, pero también los tratados de Institucionalización del Parlatino, la Constitución Bolivariana y la propia Ley de Orgánica de Procesos Electorales en su artículo 191, de modo coincidimos en afirmar que significa un retroceso que cercena derechos electorales fundamentales”.
Nota de prensa