Es posible que Adam Smith, el economista más famoso de la historia por escribir y fomentar en 1776 su obra cumbre, “La riqueza de las naciones”, una investigación profunda sobre las causas y la naturaleza que generan las riquezas en los países, así como la incidencia del valor del trabajo, los productos, los precios y la mano invisible que regula el mercado; se haya estremecido en la madrugada del jueves con un tabardillo de ultratumba al enterarse de la entrega del honoris causa que otorgarán a nada más y nada menos que a su némesis en la destrucción de la riqueza y los valores, autor de una obra aún no escrita pero llevada a cabo con total desparpajo y reflejada de forma triste y dolorosa en las ruinas de la nación petrolera más activa y pujante de finales de siglo pasado.
A pesar de no tener ninguna carrera universitaria conocida el presidente venezolano, Nicolás Maduro, recibirá el doctorado honoris causa de manos de una empleada suya, la rectora de la UBV Maryann Hanson, bajo el argumento de haber adquirido un compromiso con la revolución que más ha intentado socavar y violentar las universidades públicas y privadas del país.
Sin embargo lo que más aplaude esta pléyade de comunistas enchufados al gobierno es al sinsentido de la destrucción por la destrucción misma. Su triunfo es la continuidad pragmática al legado de Chávez cuya máxima económica está contenida en un proyecto denominado “Plan de la patria”, rechazado en el proceso refrendario del 2007 pero impuesto a fuerza de golpes continuados desde la complicidad de un Estado chavista.
Todo lo que vivimos es ese acto reflejo destructivo de los 5 motores aquellos que activaron la invasión de fincas, las expropiaciones, destrucción del aparato productivo, cierre de más de 5 mil empresas en 16 años devastadores, el chantaje de un control de cambio delictivo que alimentó una corrupción desatada, sobre todo desde el estamento militar de turno confabulado con todo este complot que desangró la patria; no olvidemos el lavado de dólares en paraísos fiscales, malversación de recursos hacia los gobiernos aliados del régimen, el monopolio perverso de las importaciones, el secuestro del BCV y la inmolación de PDVSA, la principal industria del país generadora de divisas.
El país fue atracado, violentado, devastado lentamente ante nuestros propios ojos para colocar un nuevo rey carente de luz y sin destellos de genialidad, pero al que no le ha temblado la mano para imponer el oscurantismo de un fracasado sistema económico comunal amparado por la mediocridad y el miedo.
Lo hizo destruyendo toda actividad de libre mercado, secuestrando los dólares, incitando las colas interminables, sorprendiendo con los “Dakasos”, invocando el desespero de la escasez, imponiendo las tarjetas de racionamiento, creando la desesperanza ante el cierre de todas las salidas, convirtiendo a los ciudadanos en rehenes de la revolución.
A confesión de partes relevo de pruebas. El presidente de la comisión de Finanzas, Ricardo Sanguino, ha dicho esta semana a través de Telesur que el modelo económico venezolano se regirá por el desarrollo de la actividad productiva de las comunidades organizadas por el chavismo, tal como lo establece el Plan de la Patria 2013- 2019, diseñado por el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.
“Ya tenemos aprobado todo un cuerpo de leyes que regirá el desarrollo de la actividad productiva en comunas que sustituirá el aparato productivo capitalista”, refiere el alfil de esta componenda de choque sin explicar que el principal objetivo de esta artillería castrista es mantener a raya toda idea de emprendimiento, generar mayor dependencia ciudadana ante el gigantesco monstruo burocrático clientelar y desencadenar el chantaje de persecución y destrucción económica de quienes no se asimilen al sistema comunista.
En cambio la reina del tablero situacional en Miraflores, Cilia Flores, no oculta el quiebre de Pdvsa.
Después de 16 años de una revolución que dilapido 10 planes Marshall de reconstrucción de Europa con la creación de un sistema corrompido que ya va por la segunda generación de bolichicos tragadólares, la primera combatiente descubre el agua tibia al darse cuenta que ya no podemos depender única y exclusivamente del petróleo. El quiebre de Pdvsa es en la práctica el quiebre del país.
¿Cuál es la propuesta de este régimen para dejar de vivir de la renta petrolera? ¿De qué viviremos? ¿De las franelitas con los ojitos de Chávez que vendamos a los países del Alba? ¿De los intereses que generen los dólares mal habidos que fueron lavados en la banca privada de Andorra y el HSBC? ¿De la nueva situación de Cuba con el acuerdo firmado con los EEUU? De la solidaridad de los países aliados a la revolución que exprimieron todas nuestras riquezas cuando Chávez regalaba a manos llenas?
Lo cierto es que un profesor universitario no devenga ni un dólar diario y la clase media profesional ha sido pisoteada, sobrevive prácticamente de la limosna luego de la destrucción de una de las economías más prometedoras de Latinoamérica.
Un estudio reciente realizado de forma conjunta por la UCAB, UCV y la USB reflejó que ahora somos más pobres que nunca, incluso la extinta clase media. Alrededor de 3 millones 500 mil hogares no tienen como hacer las 3 comidas diarias porque no tienen capacidad de adquirir la cesta básica ubicada en 31 mil bolívares fuertes en marzo-abril del 2015, mientras un millón 700 mil hogares se encuentran como indigentes en la pobreza extrema.
Ese siempre fue el plan del castrochavismo que ahora debe concluir el cabellomadurismo. Un plan que seguirá erosionando hasta los huesos si la barbarie gana de nuevo las elecciones al parlamento
La socióloga Natalia Sánchez de la Universidad del Zulia, refiere que lo peor es que vamos a llegar a los niveles más altos de pobreza de ingreso desde 1975, es decir que en los últimos 40 años no habíamos tenido unos niveles tan altos de miseria como los que vamos a sufrir este año.
Son los 15 millones de nuevos pobres que necesita esta revolución para seguir su rumbo autoritario. Los aplausos que escuchará Maduro cuando reciba su honoris causa por destruir el patrimonio económico de los venezolanos.
@damasojimenez