María Corina Machado: En Haití se selló la derrota moral de Maduro y su régimen

María Corina Machado: En Haití se selló la derrota moral de Maduro y su régimen

MCM15NOV2015640

 

María Corina Machado encabezó esta semana masivos recorridos por sectores de Valera (municipio Valera) y La Quebrada (municipio Urdaneta). Conversamos con la Diputada Machado sobre las consecuencias e implicaciones del arresto en Haití y posterior extradición de dos sobrinos del Presidente Nicolás Maduro, acusados por tratar de introducir 800 Kgs de cocaina a los Estados Unidos. Nos habló sobre este caso y sobre las razones de su optimimo para con el futuro cercano de Venezuela.





 L.P: Esta semana un sobrino y un ahijado de la primera dama de Venezuela, Cilia Flores, fueron arrestados en Haití cuando trataban de negociar un acuerdo para traficar cocaína a Estados Unidos. Esto confirma una serie de advertencias que usted ha venido realizando sobre la relación entre gobierno y carteles de la droga.

MCM: Lo que Venezuela y el mundo están presenciado -en cuanto a la operación de un régimen con vínculos criminales- no tiene precedentes en nuestra historia, y es la confirmación de lo que hemos advertido: Maduro y su régimen han dejado de ser un proyecto político y han derivado en una organización criminal.

Cuando advertimos lo que estaba ocurriendo, muchos lo consideraron “un extremismo” y una exageración. Lo verdad es que nos quedamos cortos. Estamos constatando la penetración de la mafia criminal y el narcotráfico en los más altos niveles de la conducción política del país.

Esto es una confirmación de la destrucción de la institucionalidad, pero sobre todo de la devastación moral que ha arrastrado al régimen, a los órganos del poder público y a las instituciones venezolanas. En cualquier país con un mínimo de institucionalidad, un hecho como éste hubiese generado la renuncia inmediata del jefe de gobierno.  Los venezolanos, hoy más que nunca, tenemos derecho a exigirle a Maduro la renuncia. Ha debido hacerlo de inmediato, el solito.

L.P: Y porqué no ha ocurrido?

MCM: Venezuela está sometida a una censura atroz. En horas, esta noticia se convirtió en  la más importante del Hemisferio, desde Alaska a la Patagonia. En Venezuela, por el contrario, unos pocos medios privados, nacionales y regionales y páginas webs la reseñaron; y entre  los cientos de medios (televisoras, radios, impresos y pags webs) agrupados bajo el SIBCI,  los hechos fueron mencionados en escuetas reseñas para desestimarlos o negarlos, tres días después. Existe terror entre medios y periodistas de divulgar o comentar estos hechos. Pero a pesar de todo esto, toda Venezuela se enteró, y eso me quedó claro en Trujillo…

Te confieso cuánto me sorprendió lo que ocurrió apenas 24 horas después de que se conoció la noticia. Yo estaba en La Quebrada, un pueblo campesino de Trujillo, en el cual, hasta hace poco, la oposición no podía ni entrar. Pero esa noche la gente desbordó las calles en una manifestación sin precedentes…lo que yo no esperaba era que campesinos, jóvenes y adultos, estuvieran perfectamente al tanto de la información sobre los hechos de Haití.

Informados e indignados! Campesinos y productores, hoy arruinados por un régimen que los obliga a vender sus productos por debajo de los costos, sometidos a vacunas y extorsión, no admiten la opulencia y desfachatez con la cual actúan los jerarcas del régimen, cometiendo delitos atroces y sintiéndose intocables.

L.P: pero amanece y pareciera que todo sigue su curso inmutable en la vida del país …

MCM: Creo que amanece y ya nada es igual. Lo ocurrido en Haití y lo que se ha develado desde entonces, es un quiebre en este proceso. Un evento de esta magnitud, con tantas ramificaciones irá tomando fuerza en la medida en que como sociedad, vayamos procesando lo que esto significa.

Por otra parte, el 6D representa una contención ante la urgencia y dolor de tanta gente.? Los venezolanos que somos un pueblo pacífico y queremos una transición en paz, vemos en el 6D la oportunidad de canalizar  toda esta indignación y energía, para lograr el cambio.

Pero lo que el régimen tiene que tener muy claro es que la sociedad venezolana no va a permanecer resignada ante un nuevo arrebato de su soberanía popular.

El régimen, por lo tanto, tiene dos opciones: o reconoce la inminente victoria de la oposición  el 6D y asume que ello ineludiblemente llevará a una transición hacia la democracia; o se atreve a dar un zarpazo cuyos resultados nadie va a creer y que terminará de deslegitimar a un régimen que hoy es considerado forajido y corrupto hasta por sus propios seguidores. Y que también derivará en una transición.

L.P: Qué sustenta esta certeza de que el 6D inevitablemente acelerará la transición?

MCM: Recorriendo toda Venezuela de pueblo en pueblo, y especialmente en lugares en los que otrora el régimen parecía imbatible, estoy segura de que la mayoría que queremos un cambio es inmensa, e incluso mayor a la que reflejan las encuestas.

Para mi es tan emocionante ver los sentimientos que afloran; el resultado es sereno pero firme y apasionado. Me impresiona el efecto del desengaño en quienes creyeron de buena fe. Se sienten traicionados y abandonados. Se les pretendió sembrar miedo y desconfianza hacia quienes planteamos una Venezuela distinta, pero hoy, todas esas barreras se han caído.

Por fin hay claridad en llamar las cosas por su nombre: una dictadura militarista y mafiosa. Después de esta semana, nadie dentro o fuera del país, alberga la menor duda al respecto.

L.P: Podrán los ciudadanos derrotar en las urnas electorales a un gobierno que usted ha definido como una organización criminal?

MCM: No sólo con el voto y menos con el voto ingenuo. Que nadie se engañe! El voto es un acto de rebeldía, un instrumento de lucha que debe ir acompañado de la presión ciudadana en la calle. Y desde luego, con la presión internacional de quienes hoy finalmente entienden lo que está ocurriendo en Venezuela.

No es causal que se hayan producido documentos como la carta del Secretario General de la OEA, Luís Almagro a Tibisay Lucena, que representa un punto de inflexión en el comportamiento de la OEA hacia Venezuela. Cuando Almagro dice “Venezuela tiene obligaciones con la democracia que trascienden a su propia jurisdicción”  es una advertencia muy clara que demuestra que la comunidad internacional entiende la perversión a la que ha llegado este sistema y el significado de estas elecciones para el país y la región.

L.P: Pero muchos insisten, incluso en la propia oposición, de que se trata sólo de una elección parlamentaria?

No hay un solo venezolano que me haya dicho que estas elecciones se tratan simplemente de elegir una Asamblea Nacional. El 6D es un veredicto sobre el futuro de la democracia en Venezuela y el régimen de Maduro. Ellos lo saben y también que su derrota política es inevitable. Los hechos de Haití sellaron su derrota moral .

L.P: A qué se enfrentará entonces el gobierno el 6D?

MCM: Tienen solo dos opciones: o asumen la derrota electoral producto de la avalancha de votos que los adversan o un fraude monumental. Eso lo saben ellos y lo sabe la gente, dentro y fuera del país.

Yo insistí durante mucho tiempo que la derrota electoral tenía que ir precedida por la derrota política. Hoy diría que ha ocurrido una derrota más importante, que es la derrota moral de este régimen. La desconexión en el plano espiritual y emocional con la población, por la evidente degradación moral del régimen, es ya insalvable. Por eso, hagan lo que hagan, el 7 de diciembre comienza una Nueva Venezuela.