“Censura judicial ocupa primera plana en caso del diario Correo del Caroní, la posición asumida por los jueces legalizan la mordaza y el terror jurídico”, señaló el diputado a la Asamblea Nacional, Omar González Moreno.
Nota de prensa
El parlamentario anzoatiguense precisó que la medida tomada por los jueces es “una herida mortal al periodismo”.
“Nuevamente el poder judicial se pone al lado de la censura y la dictadura. Nuevamente los jueces demuestran que están de espalda a la legalidad y la moral”, señaló el legislador de Vente Venezuela.
González Moreno precisó que la sentencia de 4 años de prisión con prohibición de salida del país que pesa contra David Natera Febres, ex presidente del Bloque de Prensa, es un ataque contra el periodismo “serio e independiente”.
Al régimen, como a los jueces autocalificados como revolucionarios, no les conviene un periodismo libre, incisivo, irreverente y analítico, prefieren los medios y los comunicadores que sólo difundan la propaganda oficial.
Manifestó su contundente rechazo al nuevo ataque del régimen contra los periodistas. “Hemos sido, los comunicadores sociales, uno de los gremios más golpeados y perseguidos por un modelo político que se basa en el silencio, la complicidad y la oscuridad para gobernar”.
El comunicador social y dirigente político exhortó a sus colegas del gremio, tanto periodistas, comunicadores sociales, reporteros gráficos, locutores, y demás defensores de la libertad de opinión y de prensa a “levantar sus voces” contra lo que ponderó como una “ignominia gubernamental”.
Lamentó que el periodismo pase a ser “primera plana” por la falta de libertad de ejercicio de la profesional en medio de la dictadura de Nicolás Maduro.
El coordinador de Vente Venezuela en la entidad oriental agregó que acciones injustas como el arresto de un comunicador por cometer el “gravísimo delito de informar” se suma a la lista de razones para pedirle la renuncia a Maduro.
“Esto no lo aguanta nadie, mientras la ciudadanía se muere de hambre el régimen sólo se concentra en hostigar y limitar el ejercicio del periodismo”, puntualizó.
“Será que en Miraflores creen que callando a los comunicadores sociales se acabarán las colas, la inseguridad y los terribles actos de corrupción que enlodan la moral pública”, se preguntó.
Caso
Omar González Moreno calificó la decisión judicial como una “simple represalia” del régimen en contra de un diario que se caracterizó por su independencia y acuciosidad periodística.
Recordó que el Diario El Caroní fue el medio de comunicación que develó los casos de corrupción en la institución pública Ferrominera del Orinoco.
El diputado planteó la necesidad que el Poder Legislativo discute y vote un apoyo al ejercicio libre del periodismo en el país.
“Como diputados no podemos dejar solos a los valientes periodistas que día a día se enfrenta e irritan, con la verdad, a un régimen corrompido”, dijo.