Médicos venezolanos están recurriendo a Google y Twitter para comprender el alcance de la epidemia de Zika en medio de un apagón del gobierno venezolano de los datos oficiales de salud.
Por Stephen Kurczy en Americas Quaterly (AQ) | Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Cuando se trata del impacto del virus Zika en Venezuela, es la palabra del gobierno frente a Google y Twitter.
Sobre la base de los datos recogidos en parte del motor de búsqueda Google y de la red social Twitter, el grupo de vigilancia de la salud del Observatorio Venezolano de la Salud (OVS) estima que cerca de 700.000 personas han sido infectadas con Zika en Venezuela. Eso es alrededor de 150 veces mayor que la última cifra del gobierno de 4700 casos a finales de enero, y también está por encima de otras estimaciones independientes recientes. Si las cifras son precisas, Venezuela país más afectado en el mundo fuera de Brasil – poniendo cada vez más presión sobre un sistema de salud nacional que ha visto ya la escasez de medicamentos y equipos médicos.
La estimación del OVS es sólo eso, y no es un recuento exacto. Se basa en parte en un algoritmo que la organización desarrolló después de consultas con Google y Twitter. El algoritmo utiliza los datos de Google Trends para observar la prevalencia de “Zika”, “dengue”, “chikungunya” y otras palabras claves utilizadas por los venezolanos en las redes sociales y otros sitios de Internet. La iniciativa es parte de una tendencia cada vez mayor entre los médicos y organizaciones de salud del uso del análisis de datos extraídos de fuentes en línea para comprender la propagación de enfermedades, desde el Ébola al H1N1 .
Hay razones para creer que este tipo de datos puede ofrecer una imagen precisa de cómo se comportan las enfermedades. Julio Castro Méndez, profesor de epidemiología tropical en la Universidad Central de Venezuela con experiencia en programación de computadoras, está liderando el estudio y análisis de la OVS. En una entrevista con AQ , relató que observó una alta correlación entre los resultados predichos por el algoritmo de la OVS y los datos oficiales limitados que están siendo puestos a disposición por el Ministerio de Salud de Venezuela. Por ejemplo, los casos reportados del ministerio sobre el dengue se correlacionan aproximadamente en 95 por ciento con lo que los algoritmos predicen, según Castro.
La gran diferencia entre las cifras del OVS y los presentados por el gobierno también es consistente con otras fuentes. Además de la búsqueda y obtención de datos en medios sociales, la estimación del OVS es alimentada por los números obtenidos de la organización no lucrativa Red para la Defensa Nacional de Epidemiología, que en enero estimó que ya se habían producido 400.000 casos de Zika en Venezuela, sobre la base de informes de salud que no se han hecho públicos. La Sociedad Venezolana de Salud Pública en enero también concluyó que había habido al menos 400.000 casos Zika basado en encuestas a los funcionarios de salud.
“Hay que poner esto en el contexto de Venezuela“, dijo Castro a AQ en una entrevista telefónica. “El gobierno no ha aceptado la inflación del 200 por ciento . Ellos no han aceptado el alto índice de homicidios . Ellos no han aceptado el problema con la medicación . Y tampoco han aceptado la epidemia de Zika “.
La Embajada de Venezuela en Washington DC no respondió a las solicitudes de comentarios, de AQ y los funcionarios del Ministerio de Salud de Venezuela han declinado hacer comentarios a la prensa internacional sobre este tema.
El Zika se ha extendido a por lo menos a 44 países o territorios , de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. Mientras que Brasil y Colombia han declarado el estado de emergencia por el virus transmitido por mosquitos y campañas nacionales de sensibilización han sido lanzadas, Venezuela ha restado importancia a la epidemia hasta el punto de negarse a liberar un boletín semanal de la salud.
Siempre habrá alguna discrepancia entre los casos sospechosos de Zika, que se producen cuando una persona muestra las características clínicas del virus, y los casos confirmados de Zika, que requieren un diagnóstico de laboratorio.Pero en Venezuela, donde hay una falta de datos oficiales sobre los casos sospechosos o confirmados, el OVS y otras organizaciones académicas han recurrido a medios alternativos de recolección de datos que podrían reflejar el impacto total de la enfermedad.
Fue este apagón informativo el que estimuló a Castro a llegar directamente a las empresas de tecnología de Silicon Valley el año pasado. Su objetivo era desarrollar algoritmos que pudieran filtrar los datos de búsqueda de Google y la información del medio social Twitter para crear una imagen del verdadero impacto del Zika en Venezuela. “Como nos encontramos con un bloqueo en la información oficial, tuvimos la necesidad de datos de otras fuentes“, dijo Castro. “Nos dan una imagen de que tan grande es la epidemia”
La estimación del OVS incluso podría ser baja. Venezuela ha visto cerca de 800 casos de síndrome de trastorno inmunológico de Guillain-Barré (SGB) , ligado al Zika desde finales del año pasado, según Castro. Dijo que “generalmente se supone” que existe una relación de 1 a 1.000 entre el SGB y el Zika, que se traduciría en un estimado de 800.000 casos de Zika en Venezuela.
Los números son altos, pero no son sorprendentes dada las proporciones epidémicas de Zika en Brasil y Colombia, que han informado acerca de 1,5 millones y 72.000 casos, respectivamente. La autoridad sanitaria de Colombia predice que más de 600.000 ciudadanos serán infectados con el virus de este año. Los algoritmos de Castro también lo llevaron a concluir que el SGB estaba en su apogeo en Venezuela a una velocidad de alrededor de 100 nuevos casos por semana, lo que está en línea con la cifra oficial del gobierno .
Más que una simple herramienta para Venezuela, los algoritmos del OVS pueden pronto estar disponibles para otros países. En un próximo artículo de investigación arbitrado, Castro explicará con más detalle sus métodos de manera que otros grupos puedan usar los medios sociales para combatir la mala información y llenar los vacíos de datos. Castro ya ha viajado a Ecuador para compartir su trabajo y explicar la forma en que puede ser utilizado para recoger los datos de salud.
Sin duda, hay limitaciones en este enfoque, el más obvio cuando se trata de evaluar las aldeas remotas y otras áreas que carecen de conectividad a Internet o donde las personas son menos activos en las redes sociales. Pero la Dra. Marianella Herrera Cuenca, directora del OVS, argumenta que es mejor que nada.
“Esperamos que se convierta en un modelo para otros países“, dijo la Dra. Herrera. “Si se dirigen al problema de una manera adecuada, es probable que se tenga el resultado correcto cuando se proponen las acciones. Si no se aborda el problema, no se pueden tener las medidas correctas“.