Para nadie es un secreto que la cantidad de personas que ejercen la economía informal y el denominado “bachaqueo” (comprar y revender con sobreprecio productos regulados de la cesta básica) ha crecido notablemente en los últimos años, publica El Tiempo.
Ya pareciera usual observar puestos improvisados en las calles del casco central de Puerto La Cruz o Barcelona, donde ciudadanos venden ropa, calzado, medias o lentes, así como también se ha hecho notorio que hay quienes prefieren expender productos esenciales, entre ellos, pañales, leche en polvo, azúcar, arroz, pasta, entre otros.
Según la última data registrada por la Federación de Trabajadores de Anzoátegui (Fetranzoátegui) en enero de 2016, la fuerza trabajadora de la entidad asciende a un millón 478 mil 600 individuos.
Tito Barrero, presidente de este gremio, aseguró que de esta cifra, 60% se dedica a la economía informal y al bachaqueo, producto de la crisis que atraviesa el país.
“El principal culpable de que exista bachaqueo y gente sin empleo formal en el país es el Gobierno nacional, quien no ha asegurado fuentes de trabajos estable para la población”, expresó.
Indicó que 18% de masa laboral sí posee un empleo formal, mientras que 22% está desempleadas actualmente.
Explicó que la mayoría de las personas que han optado por la economía informal, ven esta actividad como una mejor opción para generar más ingresos monetarios, ya que según afirmó, “el sueldo mínimo de ahorita es insuficiente para cubrir los gastos”.
En cuanto al desempleo en Anzoátegui, Barrero señaló que aumentó sólo 2% en comparación con 2015, cuando la cifra se ubicaba en 20%.
Sin embargo, mostró su preocupación porque en la zona industrial de Barcelona continúan cerrando las compañías, entre ellas, citó la Mitsubishi.
“Esta empresa tiene tiempo paralizada y allí podrían quedar sin empleo más de 600 personas. El Gobierno tiene en sus manos la posibilidad de resolver el problema económico. El único que puede poner a producir las empresas que están paralizadas es el Ejecutivo nacional”, acotó.
Mientras las grandes y pequeñas empresas cierran sus puertas al público, la mitad de los comerciantes agrupados en la Cámara de Comercio de Barcelona han disminuido sus nóminas.
Así lo aseguró, hace pocos días, el vicepresidente del gremio, Bachar Kobrosly, quien agregó que durante 2016 “ningún” dueño de negocio en el bulevar 5 de julio ha contratado a nuevos empleados, producto de las pocas ventas, la escasez de mercancía y los aumentos de sueldo anunciados por el presidente Nicolás Maduro.
Trabajo adicional
La crisis económica ha llevado a algunas personas a conseguir dinero a través de una actividad comercial adicional a su empleo fijo.
El presidente de Fetranzoátegui indicó que 80% de los trabajadores formales realiza una actividad comercial adicional a su empleo, tales como venta de queso o helados, servicio de taxi y de costura.
“Ya la gente está pasando hambre porque todo esta caro y por eso necesita más de un trabajo para sobrevivir”, dijo Barrero.
2 de cada
10 jóvenes que cumplen sus estudios en las diferentes universidades del estado Anzoáegui, consiguen un trabajo formal de inmediato. Así lo afirmó el presidente de Fetranzoátegui, quien agregó que “estamos graduando jóvenes para el desempleo o para la exportación. Muchos se han ido del país porque no consiguen trabajo”.
Posición
Stephanis Gómez, dirigente juvenil del Movimiento Independiente Primero Anzoátegui Para Anzoátegui (Mipapa), manifestó su apoyo al referéndum revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro. “Muchos jóvenes se están yendo porque no consiguen empleo o nos pagan poco. Queremos un cambio”.