El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, rechazó la agresión contra un grupo de diputados de la Unidad en las instalaciones del Consejo Nacional Electoral (CNE), quienes se trasladaron a dicha sede para exigir el cumplimiento del reglamento que norma la realización del Referendo Revocatorio, dado que este jueves se cumplieron 40 días del proceso de revisión de firmas y siguen sin anunciarse los puntos de validación.
Prensa Miranda/Daniela Moros
“Unos 60 parlamentarios exigieron la presencia del algún rector y fueron agredidos en las afueras del CNE. Presuntamente la señora Lucena ordenó tal ataque. Acciones como estas debemos rechazarlas, más cuando nuestros diputados lo que están defendiendo es el cumplimiento de la ley, de nuestra Constitución. Ellos estaban exigiendo a los poderes que cumplan sus obligaciones (…) Que lo sepa Ernesto Samper, bajo estas condiciones no puede haber diálogo, no vamos a lavarle la cara a este gobierno. El diálogo tiene que ser respetando los derechos constitucionales”.
Precisó que el organismo electoral se burla de la decisión de cambio del pueblo. “El día de ayer (miércoles) no dieron respuesta, hoy (jueves) tampoco la han dado. Que les quede claro, no nos vamos a resignar, seguiremos luchando porque el 80% de los venezolanos quiere cambio. El revocatorio no nos pertenece a nosotros, sino al pueblo. El Revocatorio significa cambio político y con el la solución a las colas, que haya comida, medicinas y que se le ponga freno a la inseguridad”.
Capriles reafirmó que Venezuela atraviesa un momento crítico por derechos básicos insatisfechos, como adquirir alimentos. “Hemos insistido en que están dadas las condiciones para un estallido social y la Unidad no tiene la capacidad de contener una situación de este tipo, pero el gobierno sigue sordo. No sigan jugando con la paciencia del pueblo. No le echen más gasolina al fuego, no queremos que esto reviente”.
Durante un Gabinete Parroquial en el sector Brisas del Tuy, ubicado en la parroquia Arévalo González del municipio Acevedo, el mandatario regional aseguró también que los Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) significan “la nueva estafa” de Nicolás Maduro. Alertó que esta alternativa “del madurismo” generará más desabastecimiento. “Pretenden poner al pueblo a pelear por comida”, finalizó.