Despedidos del Seniat en Guayana por respaldar el referendo vencen el miedo validando sus firmas

Despedidos del Seniat en Guayana por respaldar el referendo vencen el miedo validando sus firmas

Foto: correodelcaroni.com
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Claudia validó su firma para el referendo revocatorio al día siguiente y José Antonio y Haydee después. No lo pensaron dos veces cuando recibieron la comunicación firmada por el presidente del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria de Venezuela (Seniat), José David Cabello.

Correo del Caroní

El lunes 20 de junio los tres funcionarios especialistas en aduana fueron notificados de despido después de 15, 25 y 32 años de servicio, respectivamente.





Los despidos por razones políticas están expresamente prohibidos en el Convenio 111 sobre la discriminación (empleo y ocupación) de la Organización Internacional del Trabajo suscrito y ratificado por Venezuela; en los artículos 19, 21, 57 y 89 de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela; en el artículo 18 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras, y en el artículo 21 de la misma ley.

“En mi condición de máxima autoridad, según lo dispone el artículo 7 de la Ley del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria, cumplo con hacer de su conocimiento la decisión de removerlo y retirarlo del cargo”, empieza la comunicación para los tres funcionarios.
Son una muestra del universo de cientos de funcionarios que -bajo promesa del Gobierno- han sido despedidos por firmar a favor de la convocatoria a referendo revocatorio contra Nicolás Maduro.

“Me cansé”

Haydee Arvelaiz votó una vez por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). La llamaron insistentemente.

– ¿Ya fuiste a votar?, tienes que ir a votar y luego tienes que llamarnos y avisarnos, le dijeron.

Lo recuerda claramente. Como otros de sus compañeros del Seniat tenía miedo. Con dos hijos, sus padres mayores y más de 20 años en la administración pública. “Fui a votar obligada, por miedo”.

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