Por no tener leche le daban puré de papa a su bebé de 8 meses

Por no tener leche le daban puré de papa a su bebé de 8 meses

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Con solo ocho meses de edad, Emilie Sarmiento ya ha padecido el funcionamiento de la salud pública en Maracaibo, la misma que se repite en cada rincón del país. Con un cuadro de desnutrición severa y una infección auditiva, la hija menor de los cuatro pequeños de Rosiris y Jhair lucha por su vida en el quinto piso del Hospital Dr. Pedro Iturbe, conocido como el General del Sur, reseñó La Verdad.

“Cuando ella nació yo le daba pecho, pero ya a los dos meses me di cuenta de que lloraba mucho, yo sentía que ella no se llenaba, no se sustentaba. Entonces le compré un pote de fórmula en siete mil bolívares, pero no le duró mucho tiempo y en vista de que no podía seguir comprándolo a ese precio, le di leche completa”. De eso hace hoy seis meses.





“En el nombre de Dios”, Osiris le preparó un tetero a su bebita con fruta y leche completa, pero lejos de callar el llanto de la pequeña -“lo que tenía era hambre”-, se agravó la situación y comenzó el viacrucis. “La bebé pasó todo el día haciendo pupú, la lleve al hospital que está cerca de mi casa, le pusieron tratamiento pero no mejoró”. Así continuó la mujer, con su bebé en brazos, por cuatro meses. En el Chiquinquirá estuvo 14 días, luego pasó al Hospital Universitario de Maracaibo, de ahí al Chiquinquirá hasta que, sin ver mejoría en la pequeña, fue a parar al General del Sur hace un mes.

La joven pareja que vive en el sector La Arrocera, del municipio Jesús Enrique Lossada, mantenía a la Emilie con frutas y papa. “Yo le daba jugo y papa cocida con una jeringa porque no tenía para comprar la leche correcta”.

Mejoría

En el Hospital Adolfo Pons, Emilie fue sometida a estudios que arrojaron que sus valores estaban bajos. “En el Universitario la nutricionista me dijo que con puro pecho no le iba a hacer estómago a la bebé, que yo la estaba matando de hambre”.

Hace un mes la bebé está recluida en el General del Sur, donde la tratan por desnutrición. Su madre pasa día y noche soplándola con un cartón porque no hay aire acondicionado. Asegura, sin embargo, que el personal del centro médico se ha portado bien con ellas. “Me ayudan con los pañales y con lo que puedan, solo me piden cada tres días un yelco que allá abajo cuesta 400 bolívares”.

Hace tres semanas Emilie Sarmiento pesaba tres kilos, ahora pesa tres kilos 700 gramos.

Necesita

Ácido fólico, henovic, L-carnitina, maxibol, vitamina E y vitamina A, pañales, leche de fórmula, compotas de fruta.

A la buena de Dios

En el hospital sirven el desayuno, almuerzo y cena solo en Pediatría. El menú es harinas, papa y queso. “Aquí le dan sopa, puré, el corazón de la arepa y jugo. Yo como lo que mi mamá me trae o aquí me dan a veces arepa o sopa. También me dan fororo, avena, maicena. Me ayudan con los pañales de ella”.

En la cocina del hospital viven al menos nueve gatos y seis perros, mientras el personal prepara sin la indumentaria necesaria para la asepsia del lugar. La Verdad realizó un recorrido por el lugar y pudo comprobar que enfermeras y personal obrero se comen las frutas y se reparten las compotas, las cuales se guardan en las batas. Durante la estadía de este rotativo en el lugar llegó un bulto de harina, uno de pasta corta, una caja de mantequilla y una caja y media de compotas.

Una de las cocineras, quien prefirió no identificarse, le confesó a este rotativo que para los demás pisos solo se sirve arepa para el almuerzo y la cena. “Hace una semana estuvimos dos semanas sin dar comida porque Mercal no trae nada, varios pacientes se vieron mal por el hambre”.