Unos 400 niños zulianos necesitan una operación del corazón

Unos 400 niños zulianos necesitan una operación del corazón

(foto María Fuenmayor)
(foto María Fuenmayor)

La vida de 400 niños zulianos que nacieron con cardiopatías congénitas depende del Gobierno nacional en este momento. De este número 200 casos se catalogan como emergencias. Desde septiembre del 2015 los padres de estos niños esperan a la llamada de las autoridades para operar a sus hijos en el Hospital Cardiológico Infantil ubicado en Caracas, que se posiciona como el único ente en el país autorizado para operar estas patologías. Así lo reseña laverdad.com / Paulina Chirinos

Dame un Nuevo Corazón Señor Jesús, Corazones Valientes y Guerreras de Dios, son las tres fundaciones que ayudan con orientación y en la recaudación de donaciones a las familias zulianas que tienen pequeños con cardiopatías. Ayer fueron, con carteles y consignas, a la Gobernación del estado Zulia para solicitar la reanudación de las operaciones, para pedir antihipertensivos y diuréticos que no se consiguen en las farmacias, mientras que en los mercados populares las ofertan en cinco mil bolívares una caja de 20 pastillas.

María José Pulgar, presidenta de la Fundación Dame un Nuevo Corazón Señor Jesús, indicó que se encuentran en crisis y tomaron la medida en apoyo a los padres que desde hace meses esperan por la llamada a cirugía. Desconocen la cifra de fallecidos este año, pero en lo que va del mes lamentaron la pérdida de seis niños que esperaba por su operación.





Sin opciones

De acuerdo a la información que recibieron las fundaciones, solo hay dos médicos que operan en el ente de salud que recibe a todos los niños con fallas en el corazón. Manifestaron su preocupación al saber que los galenos no estarán disponibles en septiembre y octubre, por lo que dejarán de llamar pacientes para ser intervenidos.

Algunas de las madres presentes se identificaron como habitantes de Rosario de Perijá, Los Puertos de Altagracia y La Concepción. Se trasladaron motivadas por la desesperación y el miedo de perder a sus pequeños.

Para Yasmiri Roque, abuela de una niña de cuatro meses con ventrículo único y trasposición de grandes vasos, es urgente que el hospital la llame. Relató que la operación que requiere la niña cuesta 17 millones de bolívares en una clínica y es imposible para su familia costearla. En este momento tiene un mes hospitalizada por neumonía y temen lo peor. “El medico nos dijo que si no se operaba a los tres meses podía quedar hipertensa pulmonar con desenlace fatal”.