Henry Arias: Las empresas básicas fueron rentables hasta que llegó el socialismo a Guayana

Henry Arias: Las empresas básicas fueron rentables hasta que llegó el socialismo a Guayana

HA12 de febrero
El secretario general del sindicato de trabajadores de CVG-Alcasa (Sintralcasa) Henry Arias, le recordó al ministro Juan Arias que las empresas básicas fueron rentables hasta que se acabó la democracia en el país en 1998.

Con casi 18 años en el gobierno, cada vez que nombran a un ministro de empresas básicas (ministerio que no existía) llegan con una visión diferente, y cada uno ha contribuido a la destrucción de las empresas y del plan industrializador de Guayana, agregó.

Arias agregó que en 18 años de “revolución” y de gestiones fallidas, en eso se les ha ido el tiempo, siendo muy dañinos para las empresas, para toda la región y sus habitantes, donde el progreso se detuvo, creando miseria y pobreza.





Invitó al ministro Arias a buscar la historia de Venezuela, y aprender que se sembró el petróleo en Guayana, y en cuanto años esto se logró, como el arranque de CVG-Alcasa o de CVG-Venalum y cuanto le costó a un gobierno de la democracia crear empresas como Sidor Carbonorca, Interalúmina (hoy Bauxilum), las briqueteras, y todo el parque industrial de Matanzas, hoy convertido en un cementerio, gracias a las políticas nefastas de todos los presidentes de empresas.

Arias invitó al ministro de empresas a ilustrarse sobre cual fue la capacidad instalada, y los records de producción de cada una de las empresas del Estado, en la mal llamada cuarta República, como también lo invitó a buscar los records de producción, incluso desde el año 1.999, en el inició del procesos socialista, cuando comienza la caída de la producción.

INVERSION PERDIDA

El secretario general de Sintralcasa, invitó al ministro averiguar cuanto dinero se ha invertido en las empresas básicas de Guayana, cuáles han sido sus logros, y compararlos con el tiempo empleado en la cuarta República, para arranque de proyectos y puesta en marcha de una que otra empresa, que hoy están atravesando la peor crisis de su historia en Guayana, acotó.

Todo lo anterior según Arias, producto de tanta incapacidad, que teniendo los proyectos en marcha, ni siquiera pudieron mantener la capacidad productiva de las empresas, porque ni siquiera invierten en mantenimiento, denunció.

El dirigente sindical le pide al ministro que haga memoria, `porque puede que con esos datos, le ayuden a entender mejor lo que ya sabe y le cuesta reconocer por razones políticas, y que por esto acabaron con las empresas básicas de Guayana, y destruyeron también las que fueron expropiadas.

Calificó las declaraciones del ministro Arias donde echa la culpa de todo este desastre a los trabajadores de las empresas de bufas, ya que sobre sus hombros las sostienen con la poca producción que hay, por la desidia y la desinversión del gobierno, dijo Arias.

“Usted no puede hacer como el avestruz señor ministro, porque forma parte del equipo que ha cometido todos los errores en Guayana”.

Según el dirigente sindical, al ministro Arias, no le queda muy bien buscar culpables en la clase trabajadora de Guayana, cuando hasta los dejaron sin herramientas, acabaron con el parque industrial pesado más importante del país.

“Yo en su lugar no hubiese tomado un cargo tan importante de ochenta y cuatro empresas a nivel nacional, y sin cartera para reflotarlas”

Quizás tenga cartera para cubrir sus gastos de andar estado por estado, visitando empresas sin que los trabajadores hallan sido escuchados

“Jamás ministro aceptaremos que se trate de culpar a la clase trabajadora de Guayana”, renuncie a su cargo y no venga con el cuento del “yo no fui” o de culpar a una “Guerra Económica” que se inventaron para esconder su fracaso, y si no quiere renunciar, entonces pida la plata que le han robado a las empresas de Guayana para invertirla en su recuperación: no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista, y concluyó diciendo que él si firmó y esta preparado para revocar a quien persigue al pueblo trabajador venezolano y arruina nuestra Patria.

NOTA DE PRENSA DE SINTRALCASA