La mayoría de los venezolanos y gran parte de la comunidad internacional distinguimos su imagen pública, pocos conocemos a la persona Tibisay Lucena pero siendo como lo es, una importante funcionaria pública, por ley estamos capacitados para exigirle responsabilidad en el ejercicio de su función. Usted manifestó su voluntad a ser postulada, nadie la obligó a aceptar el cargo, y ahora nada le impide abandonarlo, si es que perdió la fuerza y voluntad para respetar, cumplir y hacer cumplir la Constitución. Ese fue su juramento. Ser Rectora del CNE, Presidenta del Consejo Nacional Electoral no es poca cosa, en este momento es todo.
Los venezolanos, a través del proceso constituyente de 1999, aprobaron la actual Constitución, la vigente en el papel. Usted sabe quiénes aprobaron la Carta Magna, fueron millones de venezolanos identificados como el Poder Originario. Todo mandato constitucional derivado del Poder Originario es de obligatorio cumplimiento. Los venezolanos sentimos que usted, alta funcionaria pública, permanente y recurrentemente viola la Constitución, leyes y reglamentos electorales. La figura de referendo está en la Constitución y es un mandato constitucional de obligatorio cumplimiento, los venezolanos no podemos entender su conducta pública de bloquear el derecho Constitucional de los ciudadanos a expresar Soberanía Política a través del voto. No lo entendemos, inaceptable resulta la violación a nuestro marco legal. Es inaceptable no realizar la elección de gobernadores, diciembre 2016, en los lapsos establecidos por el Poder Originario, desconocer ese poder es todo, nadie puede ser indiferente.
Rectora, es imposible que escape a su atención las amenazas de distintos voceros del gobierno nacional de corte socialista, línea ideológica que usted abiertamente sigue, incluyendo el Presidente de la República, quienes han declarado que el referendo revocatorio no es una obligación, tal vez tengan razón, no es una obligación es un mandato del Poder Originario de obligatorio cumplimiento, es algo muy superior a la lucha ideológica. Sabemos que usted puede entenderlo, solo que ha decidido no acatar, en los plazos establecidos en la ley, el mandato originario, ejercicio de la Soberanía Política a través del voto.
La invito a respetar la Constitución, las leyes y reglamentos electorales, no solo es su deber, es su obligación. La forma seleccionada de retardar la realización del referendo revocatorio al ciudadano Presidente está muy clara: el gobierno desea permanecer en poder, a cualquier costo, incluyendo la violencia y represión masiva; el Poder Electoral crea las condiciones para que el retardo ocurra, y para imponer la voluntad del gobierno se hacer uso de la fuerza pública, de organizaciones paramilitares, de la Sala Constitucional y ahora de jueces sin competencia en materia electoral. Le hablo como ciudadano, no como militar retirado. Están usando de manera arbitraria e ilegal la fuerza fuera de la ley, contra la población, para suprimir derechos y garantías constitucionales.
No pongo en duda que usted entiende perfectamente la situación de alta inestabilidad e ingobernabilidad que puede llevar a niveles de violencia insospechados. La guerra socialista le apuntó al rico, bueno déjeme decirle que erraron el blanco, el hambre y la miseria es ya multitud, no se puede ocultar, ni tapar con un dedo. Apenas ayer fui a la bodega, de legumbres y hortalizas, ubicada en la calle principal de Baruta, estando allí llegó una joven madre tomó una papa, una sola, para poder hacer un puré y darle esa comida a su pequeña hija. Hay hambre rectora, hay miseria rectora, no hay medicinas, la inseguridad es el pan nuestro de cada día, la calidad de vida desapareció. Usted, gracias a su posición actual sabe con exactitud del par de millones de venezolanos que emigraron en busca de mejores oportunidades. Usted tiene en sus manos la llave de la paz del país, no se arrepentirá si la llega a usar. Ayude a parar esta barbarie. Por su formación ideológica, usted sabe que cuando el poder total cae, cae totalmente, no caiga, levántese y cumpla con la Constitución.
Finalmente siento la obligación de decirle que no hay golpe bueno o malo, sea por las armas o por el quebrantamiento de la Constitución. Todo golpe es malo, mejor es que la población desarrolle Soberanía Política. Le pido que no colabore con la violencia, la paz no tiene sustituto. Permita que la gente vote en paz.
Atentamente,
Gonzalo García Ordóñez
C.I. 3.497.287