El Hospital Central de Carúpano Dr. Santos Aníbal Dominicci, está en terapia intensiva y su pronóstico es reservado. Inaugurado en 1968 con capacidad para 200 camas y cinco quirófanos, no es siquiera la sombra del centro asistencial que enorgulleció a carupaneros y habitantes de la Costa de Paria. Golpeado por las malas gerencias y la escandalosa corrupción desatada, hoy no es capaz de garantizarle la vida a un recién nacido, a una parturienta o a un asmático por la ausencia casi total de medicamentos, equipos e insumos médicos, agua potable, desinfectantes, alimentos y por la impúdica proliferación de moscas, producto de la no recolección de desperdicios en sus adyacencias.
Tras hacer una inspección por sus instalaciones y sostener una reunión con el director del nosocomio, la diputada a la Asamblea Nacional por el estado Sucre Milagros Paz, salió horrorizada y clamó al gobierno nacional, en particular a Nicolás Maduro “abrir el canal humanitario con urgencia, para que lleguen los medicamentos necesarios para salvar la vida de cientos de pacientes. Señor Maduro, los hospitales no pueden esperar, los enfermos no pueden esperar”.
“No puedo entender como el gobernador Luis Acuña le puede tener tanta rabia a los sucrenses”, dijo al recordar que el primer mandatario regional preside Fundasalud, institución que controla todos los hospitales y centros asistenciales del estado y a la cual se le han aprobado miles de millones de bolívares sin que hasta la fecha se sepa en qué los han invertido.
La asambleísta denunció que las moscas pululan por todas las áreas del hospital, situación que podría generar una epidemia de importantes proporciones. “Aquí llegan niños, hombres y mujeres con heridas abiertas, con lesiones en la piel que ameritan atención inmediata y medidas de higiene extremas. Las moscas se posan en ellas y pueden dejar larvas que compliquen el cuadro clínico”, apuntó.
Pero es que el hospital de Carúpano presenta el mismo diagnóstico de otros nosocomios como el Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá (Huapa) de Cumaná. La diputada enumeró las deficiencias del Santos Aníbal Dominicci: No hay agua potable, no funciona el aire acondicionado, los pacientes deben llevar sus medicamentos e insumos para ser atendidos, deben hacerse sus exámenes de laboratorio, de Rayos X y otros especializados en centros asistenciales privados, los familiares deben suministrarles la comida, los productos de aseo personal y limpieza y hasta las sábanas.
“El servicio de salud en este país está privatizado, porque en los hospitales públicos no hay nada de nada. Y nos hemos encontrado con pacientes que no tienen dinero para comprar un medicamento y mucho menos comida ¿Hasta cuándo nuestros pacientes se tienen que morir de mengua? ¿Hasta cuándo la indolencia de los gobernantes? ¡Luis Acuña, es con usted! No entiendo tanta irresponsabilidad junta”, espetó la también coordinadora regional de Primero Justicia en Sucre.
Ruleteo de pacientes
Paz reveló que ante la imposibilidad de brindar la atención que se merecen todos los pacientes que llegan al hospital central de Carúpano –muchos de ellos desde la Costa de Paria-, los médicos los remiten al Huapa de Cumaná, con la esperanza de que allá sí puedan ser cuidados. “Imaginen ustedes un paciente grave que debe ser trasladado desde un municipio cercano durante dos horas hacia Carúpano, para luego tener que ser ruleteado dos horas más hasta Cumaná. Eso es inhumano, porque lo peor es que no hay garantía de que en Cumaná será atendido”.
En el Santos Aníbal Dominicci no solamente no hay agua sino que tampoco hay presupuesto para comprar detergentes ni desinfectantes. Esto podría desatar la proliferación de bacterias. “Aquí se pasa la mopa sola, a veces con agua. Por cierto, le hago un llamado al alcalde de Carúpano, Julio Rodríguez, para que ordene recoge la basura de los alrededores del hospital y de la maternidad porque en cualquier momento las moscas van a generar una epidemia”.
Milagros Paz conminó al gobernador para que abandone el cargo que le quedó grande. “Señor gobernador, yo sí aspiro, yo aspiro a que usted salga de la gobernación del estado Sucre porque lo que hoy viven los sucrenses no se justifica. Yo sí aspiro que usted asuma su responsabilidad, porque estuvo al frente de Fundasalud durante tres años y no hizo nada. Tarde o temprano tendrá que responderle a los sucrenses y además responsabilizarse por los niños recién nacidos que murieron por su negligencia e indolencia”.
La Asamblea Nacional le pidió hace dos semanas a Luis Acuña comparecer ante las Comisiones Permanentes de Desarrollo Social Integral y de Salud para que explique las razones por las cuales el sistema de salud en el estado Sucre está derruido. “Definitivamente tiene que haber un cambio de gobierno que le brinde a Carúpano y al estado Sucre progreso”, concluyó.
La voz de los desposeídos
Carmen Castillo tiene hospitalizada a su hija nació que nació con 34 semanas y reveló que no tiene recursos para comprar medicamentos menos para alimentos. “Nuestro país es rico y no entiendo por qué aquí no hay siquiera agua, no hay antibióticos, no hay nebulizadores. No es justo que esto ocurra en un país tan rico como Venezuela. He visto gente morir porque no hay el medicamento que les permita respirar. Hay moscas y no hay aire acondicionado y esta situación es peligrosa. Las condiciones son caóticas”.
Por su parte Avilio Ramón García, de 71 años, también hospitalizado, pidió al gobierno “hacer lo posible para que los hospitales funcionen bien, para que los médicos y el resto del personal puedan trabajar con normalidad. Queremos pararnos de la cama. Esto no es política, esto es humanidad lo que queremos los enfermos. Espero que cumplan, que hagan lo posible para que castigue la corrupción, porque los corruptos se roban los reales y privan a los más necesitados de recibir sus cosas”.