Una muestra plástica realizada por consumidores de drogas en rehabilitación se inauguró hoy en la sede de la Presidencia de Uruguay, en Montevideo, para enseñar al público cómo el arte puede ser una forma fundamental en su recuperación y posterior inserción social.
EFE
“Estas personas requieren de nosotros, que no los estigmaticemos, que no los criminalicemos, que les ofrezcamos oportunidades de aprendizaje y de expresión como es este caso”, dijo en la apertura de la exposición el secretario general de la Junta Nacional de Drogas (JND) de Uruguay, Diego Olivera.
La exposición, llamada “SuperArte”, integra obras en cerámica, madera, mármol, pintura y tallado realizadas por decenas de internos que han pasado o que se encuentran actualmente recuperándose en el Centro de Tratamiento de Acciones “El Jagüel”, ubicado en el departamento de Maldonado, al este de Montevideo.
El escultor y profesor del centro, Óscar Calistro Torres, encargado del taller en el que se realizan las obras, explicó a la prensa que lo que se busca desde un primer momento es que los internos recuperen los lazos familiares a través de la expresión artística.
“Que ellos empiecen a mostrar lo que ellos pueden hacer y demostrarle a la familia lo que son capaces de hacer con sus propias manos”, explicó.
“Lo importante para nosotros es que este tipo de usuarios (…) que muchas veces quedan como ocultos, hasta a veces en la vida familiar, tengan la oportunidad de ser vistos de otra manera, pero fundamentalmente que ellos se vean de otra manera”, añadió por su parte el director de Salud Mental y Enfermedades Vulnerables de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Horacio Porciúncula.
Asimismo, el director señaló que esta forma de rehabilitación sirve para la “recuperación de habilidades para la vida cotidiana” y que finalmente se posicionen ante la vida pública como “mensajeros de que es posible una salida”.
En este sentido, Porciúncula dijo que aunque las cifras de recuperación total de adicciones a nivel internacional siguen siendo muy bajos, gracias a este tipo de centros y a sus tratamientos y procesos de rehabilitación los períodos en los cuales los pacientes pasan sin recaer son cada vez mayores.
Añadió que lo “más importante” es que cuando se producen recaídas los internos solicitan ayuda “cada vez más rápidamente”.
El centro “El Jagüel” se integra dentro de la red nacional de drogas y que fue relanzado en 2008, cuenta actualmente con veintidós internos que cuentan con una asistencia multidisciplinar y con base en sus habilidades, se les trata de ofrecer diversos talleres entre los que se enmarca el de expresión artística.
