Qué futuro espera a los tres futbolistas sobrevivientes del Chapecoense

Jackson Follman, Neto y Alan Ruschel son los tres futbolistas que sobrevivieron a la tragedia. Foto: Infobae
Jackson Follman, Neto y Alan Ruschel son los tres futbolistas que sobrevivieron a la tragedia. Foto: Infobae

 

Volver a nacer. Salir con vida de un accidente aéreo en el que murieron 71 personas es prácticamente lo mismo que resucitar. En la tragedia del Chapecoense, donde fallecieron 19 futbolistas, hubo tres jugadores que lograron sobreponerse a la fatalidad: el portero Jackson Follman, el defensor central Helio “Neto” Zampier y el lateral izquierdo Alan Ruschel, reseña Infobae.

Los tres se encuentran internados en distintos hospitales de Medellín, escenario de uno de los peores accidentes de la historia del deporte, en el que también sobrevivieron dos tripulantes de la firma LAMIA y uno de los periodistas que viajaba con el equipo.





Sin embargo, el foco está puesto sobre el futuro de los jugadores, ya que viajaban con el sueño de jugar la final de la Copa Sudamericana y terminaron encontrándose con la incertidumbre de no saber si volver cómo seguirán sus vidas.

A los 24 años, lamentablemente, Jackson Follman deberá decirle adiós al fútbol profesional. Debutó en Juventude hace cinco años, pasó por Gremio y Linense, para finalmente desembarcar en el Chapecoense este temporada. Su carrera iba en ascenso.

Su padre, Paulo Follman, contó que su hijo estaba feliz en el club de Chapecó: “Mi hijo estaba muy feliz en Chapecoense, un club con el que él se identificó mucho; es un club muy familiar. Mi hijo siempre ha sido muy familiar. La previsión de futuro era buena, todo se iba encaminando.”

Sin embargo, deberá despedirse de los campos de juego porque tuvieron que amputarle la pierna derecha. “Es el que se encuentra en estado grave. Tiene una de sus piernas amputadas. Está intubado y requiere más cuidado. Sin embargo, su condición es estable”, comunicaron oficialmente desde el club.

Se encuentra internado en el Hospital San Vicente Fundación Rionegro y los especialistas permanecen atentos a la recuperación de su pierna izquierda, que también sufrió heridas graves, pero que no requiere ser amputada.

A pesar de no poder volver a ponerse los guantes, su vínculo con el club será eterno y seguramente se convertirá en un emblema de la institución por haber salido con vida del accidente aéreo que conmocionó al fútbol.

En la Clínica Somer del municipio de Rionegro, el lateral izquierdo Alan Ruschel fue sometido dos cirugías en la columna. Corrió riesgo de quedar parapléjico, pero dio batalla y “sus movimientos son normales en los brazos y las piernas”, según informaron desde la entidad del oeste de Santa Catarina.

Su ficha pertenece al Internacional de Porto Alegre y está a préstamo en el Chapecoense. Tiene 27 años. Su recuperación será larga, pero va por buen camino. “Ofrece buenas perspectivas de mejora. Ya tuvo contacto con su familia”, comunicaron desde el club de Chapecó.

Su padre viajó a Colombia para acompañarlo en la recuperación que realiza y comentó que “se está desinchando, está respirando sin dispositivos y comiendo sin la ayuda de la sonda”. Su hermana Amanda contó en las redes sociales a no recuerda nada de lo sucedido, solamente que iban a Colombia a jugar la final.

Ambos, junto con los aficionados del Chapecoense, esperan que pueda reponerse y los médicos confirmarán con el tiempo si volverá a los terrenos de juego.

Fue el último en ser rescatado, pasó varios hora debajo del fuselaje de la aeronave despedazada en el Cerro Gordo, en el departamento de Antioquia, pero Helio “Neto” Zampier podría volver a jugar al fútbol. Si vuelve a ponerse la camiseta de Chapecoense, será reconocido como un símbolo.

“Clínicamente está bien. tiene buenas perspectivas de mejora”, informaron desde el equipo, mientras que su familia fue aún más optimista. “Mi hijo está cada vez mejor. Acaba de terminar una cirugía en su pierna y los médicos dijeron que volverá a jugar”, escribió Helam Marinho Zampier, su padre, en un mensaje en Facebook.

Por el momento, el zaguero de 31 años sigue hospitalizado en la Clínica San Juan de Dios. Fue intervenido por una lesión en el tórax y por varias lesiones en la cabeza, pero está recuperado y todo marcha bien para que su carrera futbolística siga en pie.