Luis Vicente León: Los Derechos Constitucionales Electorales son un rehén del gobierno

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Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, aseguró que el proceso de diálogo y negociación ha sido dificultoso para la oposición ya que han tenido que sacrificar derechos para lograr soluciones. “Este proceso es para negociar el rescate de los equilibrios políticos y económicos del país, y esto exige poner de acuerdo a las partes y ser garantes de que esos acuerdos se cumplan. Para la oposición es un dolor de cabeza el manejo de la situación del diálogo, porque las expectativas que tiene la población opositora son muy grandes, además, están sacrificando derechos para conseguir soluciones al problema”.

En entrevista con Vladimir Villegas, León afirmó que los derechos constitucionales electorales son un rehén del gobierno, y también aseveró que los derechos de los venezolanos no se deberían discutir ya que ellos están para ser ejercidos. Además, asegura que la estrategia de diálogo y negociación están mal planteadas dese el origen: “Una negociación no se hace en público. Las negociaciones son difíciles, y eso es así en cualquier parte del mundo. Son entre dos adversarios o incluso enemigos, por tal razón se necesita de un mediador y sobretodo de tiempo. Uno de los errores que se ha cometido aquí es que todos quieren resultados inmediatos”.





“El 80% de la población quiere cambios. La oposición ganaría ahora cualquier elección que se haga. En cuanto al diálogo, antes de que este iniciara, más del 60% de la población apostaba a él, pero actualmente estos números cambiaron, ahora la mayoría no confía en él”, aseveró.

En cuanto al ámbito económico, el representante de Datanálisis, manifestó que la inflación que cubre a Venezuela se debe a que el sistema económico que ejercer el gobierno no sirve. “En el mundo no existe un control de cambio o control de precios que tenga éxito; el control de cambio genera corrupción e ineficiencia, y el control de precios genera desinversión, caída de producción e inflación. Si esto no cambia, esto no se soluciona cerrando compañías, ni metiendo presos a los empresarios y muchos menos amenazando a quienes pueden generar la inversión necesaria”.