Las circunstancias que rodean el homicidio del oficial de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Andriu Jhon Marzol Fernández (34), aún son inciertas. Unos pistoleros lo asesinaron, el pasado martes en la noche, enfrente de una casa en el barrio Libertador, parroquia Antonio Borjas Romero del municipio Maracaibo, reseña La Verdad.
Según una fuente policial, al funcionario lo despojaron de sus pertenencias, le dispararon siete veces en el pecho y la cara. El testigo con quien conversaba pudo correr para salvarse.
La Policía científica investiga el móvil del crimen como una venganza de larga data por una presunta riña que tenía desde hace tiempo. Indagan en su entorno para realizar las pesquisas, acotó un oficial.
El martes era su día libre. Se dirigió a la casa de su madre para visitarla y cuando conversaba con un vecino, un desconocido se le acercó y le dijo: “No vayan a pelar. Quédense quietos, dame el bolso”, haciendo referencia a que no sacara su arma.
Al tomar sus cosas, el homicida lo baleó y corrió hacia una esquina, donde lo esperaba un motorizado, contó Mayerling Hernández, viuda de la víctima.
La afligida mujer esperaba ayer a las afueras de la morgue por la entrega del cadáver de su esposo.
Andriu tenía tres años de servicio en la PNB. Se graduó en Caracas, pero hace tres meses fue transferido a sus labores en Maracaibo y asignado en el VEN 911. Vivía con su esposa y sus tres hijos en el barrio Portal de Belén, detrás de Villa Baralt. Era el tercero de cuatro hermanos.