Temer se muda a la casa presidencial a 6 meses de la destitución de Rousseff

Brazil's President Michel Temer attends the inauguration ceremony of new Ministers, at the Planalto Palace in Brasilia, Brazil, February 3, 2017. REUTERS/Adriano Machado
REUTERS/Adriano Machado

 

El mandatario brasileño, Michel Temer, se mudó al Palacio de la Alvorada, la residencia oficial de la Presidencia, casi seis meses después de que asumiera definitivamente el cargo tras la destitución de su antecesora Dilma Rousseff, informaron hoy fuentes oficiales.

EFE





El jefe de Estado retrasó su traslado hasta este fin de semana debido a que la residencia presidencial se encontraba en plenas reformas, según confirmaron a Efe fuentes del gabinete presidencial.

Durante estos cerca de seis meses, Temer continuó viviendo en el Palacio do Jaburu, también ubicado en Brasilia, la capital del país, y tradicionalmente destinado para hospedar a los vicepresidentes, cargo que ocupaba en el Gobierno de Rousseff.

El mandatario, que hasta hoy solo utilizaba la Alvorada para algunas comidas y reuniones, se trasladó junto con la primera dama, Marcela Temer, y su hijo, agregaron esas fuentes.

Temer asumió de manera definitiva como presidente de Brasil el pasado 31 de agosto, fecha en la que Rousseff fue destituida de su cargo por el Senado tras un juicio político por unas irregularidades en las cuentas públicas.

La Cámara alta destituyó a la entonces mandataria por 61 votos a favor y 20 en contra, en una decisión que aupó a Temer a la Presidencia, que ya ocupaba de manera interina desde el 12 de mayo pasado, cuando Rousseff fue suspendida de sus funciones para responder al juicio político.

Rousseff salió del Palacio de la Alvorada el pasado 6 de septiembre aclamada por unas pocas decenas de partidarios que se reunieron a las puertas de la mansión para esperar su partida.

Por su parte, Temer se hospedará en la casa presidencial hasta que deje el poder el 1 de enero de 2019, cuando asuma el nuevo mandatario que salga de las elecciones del año anterior.

Según un reciente sondeo, realizado por la empresa MDA, a pedido de la patronal Confederación Nacional del Transporte, la tasa de aprobación del Gobierno de Temer se sitúa en un escaso 10,3 %.

El bajo porcentaje se debe, entre otros factores, a la grave crisis económica que atraviesa el país, las polémicas reformas emprendidas por el Ejecutivo de Temer que incluyen profundos ajustes fiscales y a la polarización de la sociedad brasileña a partir de todo el proceso que llevó a la destitución de Rousseff.