Contexto Nacional / Análisis Integral Febrero 2017 / Es importante conocer su respuesta, ¿Con quién está usted más de acuerdo, con los venezolanos que dicen…?
El problema que plantean las encuestas, muchas veces es su falta de credibilidad. Claro está que hay que tener en cuenta el arte de observar, analizar, interpretar y comprender los datos, lo que llamamos nosotros la hermenéutica de las problemáticas numéricas. Permítanme afirmar, que a pesar de la manipulación de alguna de ellas, como norma general, las encuestas no mienten. Se debe aprender a tener conocimiento de estos instrumentos. Todas ellas exponen luces. Si analizamos el contexto Venezolano, la mayoría de los estudios reflejan Nicolás Maduro gravita en varios puntos críticos, siendo uno de los más difícil la acelerada perdida de su capital político que heredó del fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez, allí su dilema de hacer o no hacer más elecciones.
Venezuela transita por un momento histórico signado por una compleja crisis económica, social, humanitaria y política, no pasa un día sin que emerjan nuevas mediciones de opinión que arrojan resultados completamente disparejos o intencionados a favor de gobierno. En nuestro caso, nuestras investigaciones no benefician a la revolución, pero en la esencia de los diferentes resultados, todos, los estudios de opinión pública coinciden en que la oposición es la mayor fuerza política del país y que el respaldo popular “Maduristas” se mueve entre 18% – 15%. Además, es relevante comprender que los últimos resultados arrojados por encuestadoras nacionales todas llegan a una terminación aceptación, la oposición derrotaría al oficialismo por una cómoda brecha 40 / 35 puntos en cualquier tipo de elección popular. Evidentemente, Maduro se encuentra atrapado en su propio laberinto y más cuando más 80% de las personas consultadas mantienen su deseo de participar con su voto en cualquier evento electoral que signifique cambio de gobierno. La lógica apunta que el gobierno debería ser más racional en sus decisiones porque lo que está en juego es el futuro del país y sus generaciones. Sin embargo, Maduro, hace todo lo contrario, continúa convocando fallidos diálogos, vive desafiando al pueblo, al mundo, a la historia, las leyes, esta develado que se apoya estratégicamente en el poder de las instituciones del Estado – CNE – para aferrarse al poder.
Para nadie es un secreto CNE es aliado de la revolución, la realidad cuantitativa en los escenarios electorales condenan cualquier tipo de elección, no obstante, el organismo comicial continúa con sus estrategias y tácticas dilatorias, moviéndose en mala intención articulado a los entramados perversos que tiene la renovación de los partidos, la verdad verdadera MUD y GPP saben que tienen los viento en contra, 59 partidos políticos están llamados a relegitimarse ante CNE que sólo habla por las redes, mantiene la estrategia de quitar del camino a los partidos, restando pluralidad para venideras votaciones…¿Democracia?
Haciendo una abstracción final de nuestras investigaciones de opinión y otros estudios, las derivaciones hacen que llegamos a inmediatas conclusiones, Nicolás perdió la calle, la popularidad del presidente, de acuerdo a nuestros números, está un poco por encima de 17 puntos, es irreversible el cambio, se perdió la magia revolucionaria que los atornillo durante 18 años en el poder, emergió el desamor hacia un proyecto político que ilusiono pero no concreto los sueños de los que aspiraban un mejor país, es casi imposible llegar al final de una gestión con una opinión nacional en contra, el tiempo se le agotó a la Socialismo del siglo XXI. El CNE con rodilla en tierra, siempre esperando luces de Miraflores, sin importarle que se viole la Constitución Bolivariana de Venezuela… el problema es el MAÑANA si existe.
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