“Nos ampara la razón y el deseo de restituir la democracia y por eso los baruteños participaremos de forma pacífica en el gran Plantón Nacional que se desarrollará este lunes 24 de abril en toda Venezuela”.
La afirmación corresponde a Luis Somaza, concejal de Baruta por Voluntad Popular, presidente de la Comisión de Desarrollo Social y Bienestar, quien sostuvo reunión con vecinos de Terrazas de Club Hípico, a quienes escuchó en sus planteamientos sobre la necesidad de mejorar la calidad de los servicios públicos que reciben y con quienes se debatió los hechos suscitados en el país durante las últimas horas en procura de la restitución del hilo constitucional.
Somaza, quien estuvo acompañado del concejal Héctor Urgelles, indicó que Baruta ha sido testigo lamentable del “vil desempeño de los cuerpos de seguridad que han arremetido contra un pueblo desarmado. No podemos quedarnos callados, no vamos a cruzar los brazos, vamos a estar en la calle de forma contundente y pacífica. Lamentamos que el gobierno invierta ciento de millones de dólares den bombas lacrimógenas y equipos antimotines mientras en nuestros hospitales no se consigue nisiquiera el suero o una jeringa. Contra esto luchamos y por eso estamos agradecidos con la respuesta de la gente de Baruta.
Vecinos exponen sus problemas
Por otra parte Somaza refirió que durante la asamblea con los vecinos de Club Hípico, èstos expusieron varios planteamientos sobre sus problemas más inmediatos como el de la seguridad y la basura.
“Los vecinos no sólo hacen exigencias en el caso del servicio del aseo urbano, sino que además formulan propuestas para solventar los problemas y eso es algo muy positivo porque la gestión municipal es una cogestión vecinal, por eso nuestra invitación a que participen en las sesiones de cámara para exponerlas. Desde Baruta insistimos en el trabajo municipal mientras apoyamos la lucha de todo un país por salir de este régimen que ha maltratado a todo nuestro pueblo,” expuso el edil.
El tema educativo también fue abordado por los vecinos y fue lo que motivó que una de las habitantes de la zona, Carmen Pérez ofreciera sus servicios como psicóloga para trabajar con los niños de las escuelas que están sufriendo por el hambre.