David Morán Bohórquez: A Ernesto Samper, con especial desprecio

David Morán Bohorquez @morandavid
David Morán Bohorquez @morandavid

 

El ex Secretario General de Unasur, Ernesto Samper, ha escrito ayer en su cuenta twitter @ernestosamperp “Lamento vidas sacrificadas en como consecuencia de polarización política (…)”

Según cifras extraoficiales del Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) desde el desde el 6 de abril hasta el 19 de junio del presente año, se han registrado 96 muertes en las protestas, el Ministerio Público registra oficialmente 75 fallecimientos. En el portal de noticias runrunes  se lleva una detallada relación de los casos, con fotos, infografía y mapas.





La mayoría son asesinatos por parte de la Guardia Nacional de Venezuela, la Policía Nacional Bolivariana, policías estatales de gobiernos maduristas y paramilitares al servicio del Psuv. Han muerto por impactos de lacrimógenas, balazos, impactados por escopetazos aliñados con perdigones de acero, cabillas, tuercas, metras.

Este es el caso más reciente en Caracas, el del estudiante David Vallenilla

 

 

David Vallenilla, estaba, eso sí, pleno de vida. Era un estudiante universitario de enfermería, que no fue “sacrificado” sino asesinado, de tiro de escopeta con cartucho tres-en-boca por un militar, totalmente equipado y protegido por una reja.

 

 

La imprecisión y ambigüedad que conlleva el eufemismo “vidas sacrificadas” busca esconder, liberar de responsabilidades a los  asesinos y a los represores de los miles de heridos registrados hasta el momento en las protestas legítimas y constitucionales.

Samper “lamenta” mientras nuestro pueblo sufre. Samper habla de una imaginaria e inexistente “polarización política”: Acá lo que hay, ex Secretario General de Unasur es un golpe de estado continuado, por una camarilla corrupta que se robó el constitucional referendo revocatorio, las elecciones regionales, las potestades constitucionales de la Asamblea Nacional y que pretende con una constituyente comunal cubana robarse lo último que no controlan, que es el voto popular, universal y directo del pueblo venezolano.

Ernesto Samper obvia que la sociedad venezolana padece una crisis insólita, que el país apenas produce 2/3 de los que producía hace 4 años. Que enfermedades endémicas erradicadas volvieron, que los servicios de agua potable y electricidad son racionados, al igual que el gas doméstico. Que la escasez de medicinas alcanza el 90% y la de alimentos básicos el 80%. Que más de 2 millones de venezolanos han sido desplazados o han migrado al exterior por la violencia oficialista, la persecución y la falta de oportunidades.

El Sr. Samper llegó a un cargo para el que no estaba preparado. Insiste en la ficción de partes, cuando en Venezuela lo que hay una nación entera enfrentándose a una mafia corrupta y cruel enquistada en el poder. No hay polarización, Samper, hay hastío social, rebelión, y una muy justificada petición de votaciones.

Samper salió en enero de este año de la Secretaria General de Unasur, donde hibernó durante dos años y medio. En ese tiempo, la somalización de Venezuela, se extendió sin parar. En dos años y medio, cada 28 minutos, que marcaba también el reloj en la pulsera de Samper, caía un venezolano asesinado por el hampa. En los últimos dos años y medio una dictadura se pasó por el forro la voluntad popular para perpetuarse en el poder “con la pequeña ayuda de sus amigos”

Fueron dos años y medio oprobiosos. El mandato de Samper en Unasur terminó, sin gloria y mucha pena. Degradó la figura de haber sido un presidente electo por el hermano pueblo de Colombia. Su postura cómplice con el régimen de Maduro, sus apoyos a falsos diálogos, su desdén hacia el sufrimiento del pueblo venezolano, y sus eufemismos, lo hace también de alguna forma responsable por inacción e incapacidad notoria de la escalada represiva que adelanta Maduro con el Plan Zamora, fases I y II.

Escribir “vidas sacrificadas” para esconder asesinatos es más que reprochable. Es despeciable.

No tengo el desagrado de conocerlo personalmente, pero como verán le escribo con especial desprecio. A Ud. Samper, la historia no lo absolverá.

David Morán Bohórquez
Venezolano, con partida -original- de nacimiento