Angustiados, venezolanos aguardan huelga de 48 horas en ultimátum a Maduro

 

CAR01. CARACAS (VENEZUELA), 24/07/2017.- Fotografía de un cartel en rechazo a la Asamblea Constituyente hoy, lunes 24 de julio de 2017, en una verja de Caracas (Venezuela). Venezuela inicia hoy la semana decisiva para la elección de la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el presidente, Nicolás Maduro, con los oficialistas entrando en la recta final de su campaña en medio de protestas y llamados a paro de los opositores en rechazo a esos comicios. EFE/Miguel Gutiérrez
EFE/Miguel Gutiérrez

Nerviosos y temerosos de que falte la comida y estalle la violencia, los venezolanos aguardan una huelga de 48 horas el miércoles y jueves, en un ultimátum al presidente Nicolás Maduro para que suspenda la elección, el domingo, de la polémica Asamblea Constituyente.

AFP

“Compré comida extra, que no se dañe: latas y congelados (…). Hay que prepararse para no morirnos de hambre”, dijo a la AFP Eugenia Santander, vecina de Montalbán, oeste de Caracas.





Con enormes maletas a cuestas, decididos a migrar o abasteciéndose de alimentos, miles de venezolanos cruzan la frontera con Colombia.

“Tuvimos que adelantar (el viaje) porque las elecciones son el domingo y de verdad no sabemos qué va a pasar y para estar más seguros preferimos venirnos”, dijo María de los Angeles Pichardo, quien este martes cruzó a Colombia con su esposo y un hijo, en declaraciones a la AFP en el paso fronterizo de Villa del Rosario.

El rechazo a la Constituyente -según Datanálisis de más del 70%- escaló aún más las protestas que iniciaron hace cuatro meses para exigir la salida de Maduro, y que dejan más de un centenar de muertos.

La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) pidió bloquear las calles durante la huelga, lo que hace temer violencia. La semana pasada un paro de 24 horas dejó cinco muertos.

Para el viernes, la MUD llamó a una gran marcha en Caracas, advirtiendo que si Maduro insiste en la elección, tomará acciones más contundentes el sábado y domingo en un “boicot cívico electoral”.

– “Queremos vivir dignamente” –
Leonor Cardozo, administradora de 56 años y quien vive en El Cafetal (sureste de Caracas), compró pollo y verduras para 15 días, para no tener que salir a la calle.

Las principales centrales obreras anunciaron que se sumarán a la huelga. Sin embargo, el gobierno controla la estratégica industria petrolera, fuente del 96% de divisas del país, y el sector público, de más de tres millones de empleados.

“Exigimos a Maduro que quite la Constituyente porque va a traer más hambre y miseria. Sólo queremos vivir dignamente, que el salario alcance”, aseguró el sindicalista Miguel Quiroz, de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV).

La convulsión política se alimenta de una severa crisis económica con escasez de alimentos y medicinas, y un alto costo de la vida. El FMI calculó en 720% la inflación para este año y en 12% la caída del PIB.

– “Estoy resteada con ustedes”-
La MUD no participará en la Constituyente alegando que no fue convocada en referendo y el sistema de elección de los 545 asambleístas fue diseñado para que el gobierno la controle y pueda imponer -según dice- un “sistema comunista”.

“Maduro pretende aislar a Venezuela del mundo democrático”, afirmó el líder opositor Henrique Capriles, al llamar a los venezolanos a “dar el todo por el todo” en la huelga y la marcha.

La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, una veterana chavista que rompió con Maduro, advirtió que con la Constituyente el gobierno busca perpetuarse en el poder.

“Hay que oponerse a la Constituyente. Pueblo de Venezuela, ante las severas persecuciones y dantescos atropellos, quiero que sepan que estoy resteada (jugándose todo) con ustedes”, llamó este martes.

Maduro, sin embargo, aseguró que el domingo habrá una “victoria popular de la Constituyente”.

“Hemos soportado mil cargas del fascismo, y aquí estamos, Maduro está más duro que nunca”, afirmó durante un acto en Caracas.

Aumentando las tensiones, dos magistrados de una corte suprema paralela designada por el Parlamento de mayoría opositora, fueron detenidos este martes, con lo que suman tres los jueces arrestados.

– “Maquinaria 4×4” –
El gobierno puso a toda marcha su llamada “maquinaria 4×4”: cada miembro de organizaciones de base del partido gobernante y de los movimientos sociales debe llevar diez votantes a las urnas.

Los otros dos ejes son un censo para la distribución de alimentos subsidiados y una carnetización masiva de beneficiarios de programas sociales, lo que es visto por la MUD como un mecanismo de control y presión para un voto masivo.

Según el analista Benigno Alarcón, una alta abstención restaría legitimidad a la Constituyente, frente a los 7,6 millones de votos que según la MUD obtuvo en el plebiscito simbólico que realizó el 16 de julio contra esa iniciativa.

Esa legitimidad está también afectada por un creciente llamado de gobiernos de América Latina y Europa para que Maduro aborte su proyecto. El presidente estadounidense, Donald Trump, fue más lejos al amenazar con sanciones económicas.

Maduro dijo estar martes ser “víctima de persecucion mundial” por parte de la “dictadura imperialista”, que incluso prohibió una versión del hit “Despacito”, de los puertorriqueños Luis Fonsi y Daddy Yankee, quien consideraron el uso de su canción.