Cuando se analiza la política que ha seguido el gobierno en materia de exportaciones la conclusión es que se ha tratado más bien de un plan para liquidar al sector exportador de bienes diferentes al petróleo. De la mano del ministro Giordani se ha instrumentado una clara política para favorecer las importaciones y castigar las exportaciones. La tesis de Giordani ha sido la de anclar el tipo de cambio para procurar disminuir la tasa de inflación, política ésta que ha sido un rotundo fracaso. Con base en las cifras oficiales sobresale el hecho de que en 2012 las exportaciones no petroleras fueron 25% menores a las registradas en 1997, tal como se observa en el gráfico. Ello corrobora lo que es una orientación estratégica del gobierno: el favorecer las importaciones en detrimento de las exportaciones. Conviene mencionar que los valores de las exportaciones correspondientes 2005 y 2007 se deben a alzas en los precios de materias primas tales como el acero y el aluminio y en ningún caso a mayores volúmenes de bienes exportados.
Después de 2007 se aprecia un colapso de las exportaciones. Ello es atribuible a dos factores. En primer lugar, a la destrucción del estableciendo productivo de las empresas básicas de Guayana lo que ha producido una merma en las capacidades de los sectores siderúrgicos y del aluminio. No hay otro término para calificar la situación de estos sectores sino como de catástrofe. Tanto Sidor como Venalum y Alcasa actualmente laboran a menos de 40% de su capacidad de producción y ni siquiera puedan atender los requerimientos del mercado interno y se han visto precisadas a importar. En segundo lugar, la política de sobrevaluación del bolívar que ha auspiciado el ministro Giordani ha dado sus frutos al contraer el potencial exportador de la industria nacional. No se puede esperar otra cosa si se mantiene anclado el tipo de cambio, tal como ha venido sucediendo en Venezuela.
Pero la tesis a favor de las importaciones del ministro Giordani no se queda allí. Ha también propiciado el súper ministro de la economía la firma de un conjunto de acuerdos donde Venezuela se compromete a comprar y nunca a vender a los socios externos del gobierno de Venezuela. Cuando los representantes de gobierno extranjeros visitan a Venezuela lo hacen para colocar sus productos en el mercado local y cuando los funcionarios venezolanos viajan al exterior lo hacen para acordar la compra de bienes manufacturados en el extranjero. Ello obviamente ha debilitado la capacidad productiva interna y potenciado las importaciones.
Venezuela que tenía ventajas comparativas en ciertos renglones manufactureros tales como el acero, aluminio, auto partes, entre otras, las fue perdiendo gradualmente y ahora debe importar muchos de esos productos. Con la agricultura sucede algo similar: de exportadores de arroz y café, bajo la política económica orquestada por Giordani pasó a ser Venezuela un importador neto.
Ahora que la crisis cambiaria tocó las puertas y hay que apoyarse en el sector exportador para agregar nuevas fuentes de ingresos, la realidad es que ese sector está destruido y costará mucho recomponerlo. ¿Cuáles exportaciones Maduro si ustedes se encargaron de acabarlas? ¿Qué se puede exportar la Mercosur cuando los acuerdos sucritos con Brasil son para comprarles mercancías a ese país? En gobierno metió a Venezuela el túnel de las importaciones del cual no es fácil salir.