Yoani Sánchez afirma que vicepresidente cubano menor de 80 años sería un avance

Yoani Sánchez afirma que vicepresidente cubano menor de 80 años sería un avance

Foto Reuters

La disidente cubana Yoani Sánchez afirmó hoy en Río de Janeiro que la probable elección de Miguel Díaz-Canel como primer vicepresidente de Cuba sería un avance en la isla pero no por su posición ideológica sino por tratarse de un dirigente de menos de 80 años.

“Sería un pequeño cambio en la Asamblea Nacional”, afirmó en declaraciones a periodistas en la playa de Copacabana la bloguera, que, tras recibir de las autoridades cubanas la autorización para salir del país que esperaba hacía cinco años, inició esta semana por Brasil una gira de 80 días por una decena de países de América y Europa.

“Pero es una situación lamentable porque nos estaremos alegrando no por la tendencia política de un candidato sino por su edad”, agregó la disidente al indicar que el dirigente que puede ser ascendido al segundo lugar en el mando cubano es un exministro considerado fiel al Gobierno.





Según la autora del blog “Generación Y”, Díaz-Canel “es bastante fiel al Gobierno. Es más fácil que tengamos una sorpresa aquí en la playa que en La Habana”.

De acuerdo con Sánchez, una de las principales voces disidentes de Cuba en el exterior, en La Habana se especula sobre la posibilidad de que Díaz-Canel, de 52 años, pueda ser elegido este domingo como número dos del Gobierno en el lugar del octogenario y veterano líder José Ramón Machado Ventura.

La Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba se reúne este domingo para una sesión en la que previsiblemente confirmará a Raúl Castro para un segundo mandato presidencial y en la que elegirá a los cinco vicepresidentes del país, a los miembros de la dirección de la Cámara y a los 31 miembros del Consejo de Estado.

Sánchez, que llegó en la noche del sábado a Río de Janeiro para cerrar su gira de una semana por Brasil, aprovechó el día para conocer la ciudad y visitar locales turísticos como la playa de Copacabana y el cerro del Pan de Azúcar.

Sus guías en Río de Janeiro fueron conocidos políticos de la oposición al Gobierno brasileño, como los diputados Otavio Leite y Luiz Paulo Correira da Rocha, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

La disidente cubana se alojó en Río de Janeiro en un hotel cinco estrellas en el acomodado barrio de Barra de Tijuca, en el que un día puede costar 300 dólares, que, según Otavio Leite, le fue ofrecida como cortesía por la Asociación Brasileña de la Industria Hotelera.

En la ciudad más emblemática de Brasil la cubana paseó escoltada por tres agentes de la secretaría de Seguridad del estado de Río de Janeiro, solicitados por Leite tras las protestas de partidos de izquierda que la bloguera enfrentó en las otras ciudades brasileñas por las que pasó.

Está previsto que la cubana viaje el lunes a la República Checa, segunda etapa de su gira. EFE