¿Cómo calificarla ya? Uno busca en el castellano, busca sobre todo en el castellano que se puede decir frente a un micrófono como éste, y la lista de los calificativos se pone gruesa. En el fondo creo que es pura sinvergüenzura. Lo que nos está haciendo esta señora Tibisay Lucena, sencillamente, no tiene nombre. Ella en toda su larga experiencia al frente del Consejo Nacional Electoral siempre se cuidó, se preocupó por respetar las formas. Ya eso no importa, ya las formas no interesan para nada, cada día más obsecuente con el régimen.
El señor Maduro, hace todo un embrollo con el tema de reconocer o no los resultados, pide un documento, que se firme un acuerdo, y la señora Lucena dice ¡Cómo no. Vamos a firmar el acuerdo! Últimas Noticias, titula: “Candidatos firman hoy acuerdo con el CNE para reconocer los resultados el 14-A”.
Este es un asunto bastante menor. Es decir, Capriles el 07 de Octubre, reconoció a tiempo; inclusive, sus propios partidarios reclamaron que reconoció muy rápido la derrota. Ahora Maduro hace de esto un asunto crucial.
Pero la señora Lucena, por ejemplo, frente a los temas fundamentales, actúa con un descaro inaceptable. Se le muestra el tema de las claves secretas, y dice ella: “No hay irregularidad, ni habrá sanciones por el uso de la clave secreta”.
A ver, ¿por qué entonces es secreta la clave, señora Lucena? ¿Por qué? Si esa es una clave secreta y pillan infraganti al técnico del PSUV con la clave secreta, allí hay una irregularidad. Ahora usted dice que no, allí no hay ninguna irregularidad. Y, además, tiene otros asuntos más importantes que el mentado acuerdo. Veamos.
El Nacional en su gran titular de hoy: “Parlamentarios latinoamericanos exigen al Consejo Nacional Electoral comicios justos”. 350 senadores y diputados de 13 países se adhirieron a las 5 solicitudes de la oposición -¿Cuáles son? Sobre las que la señora Lucena no se ha manifestado: Sacar a la milicia del Plan República. Sancionar el uso de los recursos públicos- ante lo cual la señora Lucena se hace de la vista gorda. Emplear tinta realmente indeleble. Escrutar todas las boletas. Eliminar las capta huellas.
Estas solicitudes, para la señora Lucena, no tienen ninguna importancia, las ignora, las pasa por alto.
Los estudiantes que se reúnen a protestar en la Plaza la Castellana, como parte de la Operación Soberanía, exigen también este tipo de cosas. Anoche fueron salvajemente atacados por bandas del oficialismo que llegaron en motos, camiones 350. Fue algo terrible. ¿Y qué ha dicho el señor Maduro de este incidente?
“Extraños hechos de violencia, donde están involucrados un pequeño grupo muy violento, muy violento, financiado por el gobierno de los Estado Unidos”.
¿Cómo se le ocurre? ¿De dónde saca este señor esto? Es decir, la violencia de ayer en La Castellana, fue incitada, -según Maduro y las cosas que le pasan por la cabeza- por la oposición financiada directamente por los Estados Unidos.
Con ese criterio es que piensa gobernar Maduro. Que, además, como bien titula hoy El Nuevo País, se está desmarcando de todo lo que había hecho el gobierno anterior, digamos el gobierno de Hugo Chávez. El candidato oficialista promete acabar con la inseguridad, además de resolver la crisis eléctrica y la carencia de agua, todos problemas del Gobierno “anterior”.
Cuando Maduro dice “voy a resolver el problema eléctrico”, ¡pues resuélvalo ya, que en este momento es Presidente y está despachando desde Miraflores! Y además promete algo increíble: una Misión contra el burocratismo y la corrupción. Ese es el gran titular del diario Vea, en esta mañana. Y cuando uno lee lo que va a decretar, nos topamos, curiosamente, con puras medidas burocráticas.