Dos meses después haber dado a luz a Diego Fernando Maradona, Verónica Ojeda ofreció una entrevista a Gente desde su quinta de Ezeiza, donde habló sobre la llegada de su hijo con Diego Maradona y sobre su situación con su él, con quien mantuvo una relación de ocho años.
“Quiero que mi hijo crezca con su familia”, aseguró Ojeda, quien destacó su buena relación con el abuelo del bebé: “Todas las semanas se lo llevo a Don Diego para que lo vea porque yo quiero que mi hijo tenga una familia”.
“Cuando lo escuché llorar me emocioné tanto que no podía dejar de temblar, besarlo y contenerlo. Desde ese día nunca más nos separamos”, recordó Verónica, quien preparó una habitación blanca con dibujos de Winnie Pooh en las paredes, aunque su bebé no duerme allí: “Duerme en mi cama y nos despertamos abrazados”.
“Me hice unos estudios porque quería hacerme una cirugía estética. A los pocos días el médico me dijo: ‘La cirugía va a tener que esperar, estás embarazada’. Apenas me enteré de la noticia, fui y se lo conté. Le salió el contrato para volver otra vez a Dubai y se tuvo que ir solo porque yo tenía un embarazo delicado y debía hacer reposo todo el día”.
“La partida de Diego fue laboral. Después las cosas tomaron otro rumbo y tomamos cada tema como adultos. Todo pasa por algo, pero nunca me sentí abandonada por Diego. Claro que extraño a Diego. Son muchos años que no se pueden borrar, buenos y malos, en que compartimos todo. Pero ahora mi vida pasa por mi hijo… Diego eligió los dos nombres. Quiso que se llame Diego como su papá y él, y Fernando por mi hermano”, contó la ex de Maradona.
“Su familia lo ve idéntico a Diego, pero también dicen que tiene mi carácter tranquilo. Él podrá ser futbolista, bailarín, músico, lo que él desee”, dijo, sobre el futuro de su hijo, a quien quiere criar “como un hombre de bien”.
“Aunque engordé 30 kilos, lo que más comía era ensalada de frutas… Ya no tengo leche para poder darle la teta… Los médicos me dicen que pudo haber sido por el estrés que viví durante el embarazo”, destacó Ojeda.
Por otro lado, se refirió a la relación con Dalma y Giannina Maradona: “Las puertas de mi casa están abiertas para los Maradona. No voy a poner ninguna traba. Ellas son sus hermanas y para el nene sería muy importante tenerlas cerca”.
“Yo le pedí (a Diego) que no venga. Porque toda la prensa iba a estar encima, y por las cosas que pasaban en Buenos Aires, no era conveniente. Igual nos conectamos todos los días vía Skype, y Diego ve siempre a su hijo. Yo quiero que sea un papá presente. Se perdió la sensación incomparable de tocarlo, besarlo y abrazarlo. Eso es algo hermoso y estremecedor”, aseguró.
Sobre su futuro, Verónica habló de sus deseos de poner un gimnasio: “Como soy profesora de Educación Física, estoy pensando en instalar un gimnasio de alto rendimiento, con servicios de nutrición, estética, medicina deportiva, danza y canto”.
En cuanto a la nueva relación de Maradona con Rocío Oliva, dijo: “Me sorprendió porque él nunca me lo dijo, me enteré por los medios. Yo estoy muy enamorada de mi hombrecito, este amor va a ser para toda la vida”.