Guanipa: A las comunidades cuando no le falla un servicio, les falta el otro

“Después de tanto luchar para tener los servicios públicos, parece mentira que ahora estemos de nuevo luchando para que los reparen. Pareciera que uno no descansara en esta vida en cuanto a la luchar por la comunidad”. Aída Rubio, ama de casa y habitante del barrio Carmelo Urdaneta en la parroquia Venancio Pulgar, aseguró que luego de 15 años de consolidado el barrio, hoy de nuevo se ven en la necesidad de exigir a los proveedores de servicios que reparen las fallas.

La comunidad le reclama a Hidrolago la desatención en materia de aguas servidas. Un río de aguas negras atraviesa, desde hace dos meses, la calle 71 con avenida 103A del barrio, afectando a por lo menos 250 familias de las casi mil que conforman el barrio. Rubio explicó que al no funcionar las aguas negras una serie de problemas se suman a su situación.





“Muchas de nuestras casas tienen los baños sellados. Tenemos que irnos hasta la casas de familiares para usar los suyos. Ya tenemos tres meses en esto y viene Hidrolago, pero no resuelve nada. Los niños ya tienen enfermedades respiratorias y en la piel. Algo tienen que hacer porque esto no se aguanta más”.

Maritza Martínez, habitante de la calle 71 del barrio, destacó que las carreteras están en buen estado, pero que de ser necesario romperlas para arreglar el problema de las aguas negras, estaría de acuerdo. “Cuando no es el chingo, nos agarra el sin nariz. Tanto que hemos luchado por tener los servicios y siempre estamos cojeando de una pata. Desde el año dos mil no tenemos gas y con esta escasez de bombonas a veces las pagamos en 60 bolívares”.

Martínez le hizo un llamado los conductores de la línea Carmelo Urdaneta para que conduzcan con cautela frente a los charcos de aguas negras. “No sólo es que las aguas corren por las calles, sino que cuando pasan los carritos nos bañan. Casi no podemos caminar por las aceras porque la basura acumulada se vuelve montañas y cuando nos pasamos a la calle entonces nos bañan. Esa es nuestra realidad”.

Juan Pablo Guanipa, concejal de Maracaibo, detalló que últimamente la aguas negras están afectando a muchas comunidades y en periodo de lluvia la situación se complica. “Hemos ido a Hidrolago para acompañar a las comunidades en su búsqueda de soluciones a los botes de agua. Para cada una quizá hayan respuestas diferentes, pero lo cierto es que el organismo nacional que se encarga de prestar este servicio debería garantizar el buen funcionamiento de las redes y tuberías, lo que a la vez ayudaría a las familias a estar sanas y tranquilas. La realidad es que a las comunidades cuando no le falla un servicio, les falta el otro, y eso no puede seguir así. Cada organismo debe asumir su responsabilidad y ser eficiente en cumplir con la gente”.