Nike se dio el lujo de juntar a cuatro de sus mejores exponentes del deporte blanco y armar un espectáculo sin igual. Maria Sharapova, Serena Williams, Roger Federer y Rafa Nadal se dieron cita en una cancha acondicionada para jugar a oscuras.
Las líneas tradicionales de una la cancha de tenis estaban verde fluorescente y la red tenía un borde naranja, nada que ver con el tradicional e impecable blanco, además, los “cuatro fantásticos” se vistieron de ese mismo color, por lo que cuando quedaba todo a oscuras, ellos podían seguir jugando sin ningún problema.
Todo un espectáculo digno de Tron, aunque éste pertenecía a la campaña “Kings of the lights”, de la cual ellos son protagonistas. También se bautizó a esta cascarita tenística como “el partido de los 62 Grand Slams” y es que entre los cuatro han ganado esa cantidad de títulos.
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