¿Qué tipo de sexo te gusta más?

cSabemos que para todo hay gustos, desde la forma de vestir hasta el tipo de sexo que tenemos, existen personas que disfrutan más hacerlo al aire libre, en el agua o que tal en un lugar público.

Por eso hoy te traemos 10 tipos, para que nos digas cuál es tu preferido.





1. Acuático

El baño es un complemento ideal en la pareja. Los sexólogos recomendamos este juego para darle prioridad al erotismo. Ideal para hacerse caricias, porque los músculos logran relajarse y la textura de la piel está suave al tacto) o en la ducha (en los sex shops venden manijas que se colocan en la pared para facilitar las posturas sexuales). “Es delicado colocar el preservativo en ese momento”.

2. Al aire libre

Consiste en salir de nuestras cuatro paredes y tener sexo al aire libre, aunque sea en el jardín de casa. Es muy placentero, tanto de día como de noche. Se convierte en fuente de goce por la amplitud del espacio, la vivencia de libertad y las sensaciones que provocan los estímulos naturales cuando actúan sobre los cuerpos desnudos.

3. Rapidito

Sin preparativos y con la ropa semi puesta. ¿El lugar? Para las parejas más clásicas, las distintas habitaciones de la casa, el auto o el baño de un bar. Si son más arriesgados, las posibilidades aumentan: el ascensor, las escaleras o los pasillos del edificio, y el mejor de todos, el probador de un local de ropa. ¿El momento? Como corresponde, cuanto menos planeado más efectivo. ¿Las reglas? Discreción por sobre todas las cosas: acá no valen los jadeos, los gemidos o los gritos. Disfruta en silencio, es parte del encanto.

4. Gourmet

Comer con la mano una costilla de carne vacuna y convidarle a nuestro acompañante un bocado es, sin dudas, algo muy sensual. También lo es saborear los frutos de mar que, con su aroma, nos recuerdan los sudores femeninos”, “Comidas donde se utilicen los dedos, se incluyan alimentos coloridos y que se puedan compartir tendrán mayores chances de lograr cierto clímax”. De la mesa a la cama… ¡Sin escalas!

5. Exhibicionista

Es la contra del voyerismo y consiste en mostrarnos con la intención (o la fantasía) de que alguien nos vea. Sin caer en extremos podemos, por ejemplo, dejar una ventana entreabierta o tener un encuentro fogoso en el auto, para vivir la sensación de riesgo.

6. Cambio de roles

Es muy divertido y consiste, básicamente, en jugar a ser otros. La idea es transformarse en médicos, electricistas, cowboys, maestros, policías, strippers… O lo que su imaginación les ofrezca. Permite a ambos tener esa emoción de “estar con otra persona”. ¿Cómo arrancar? Simula que no lo conoces, pregúntale quién es y dale lugar para que invente su propio personaje.

7. Karezzia

El término proviene del italiano “carezza”, que significa caricia. Y de eso se trata: de tener relaciones de una forma cariñosa y suave privilegiando el placer por sobre el clímax.

Para ponerlo en práctica, sonreí manteniendo el contacto visual, míralo fijamente a los ojos lo más posible, sincronicen la respiración, agárrense y tóquense mutuamente (por lo menos veinte minutos), coloca suavemente la mano en sus genitales, emití sonidos de satisfacción o placer (pero no palabras), acaricia, abraza, masajea y pone el oído en la zona del corazón de tu pareja para escuchar sus latidos.

8. Vouyer

Es encontrar la satisfacción o el placer sexual observando la intimidad de los otros. En el ámbito terapéutico, muchas veces los especialistas fomentamos el voyerismo cuando invitamos a observar la sexualidad ajena, como en el caso de mirar videos que muestran escenas sexuales que sirven como estimuladores del deseo o como modelo de aprendizaje y de evaluación de la propia sexualidad.