Sudamérica furiosa por desvío de avión de presidente boliviano convoca a reunión

Sudamérica furiosa por desvío de avión de presidente boliviano convoca a reunión

Los países de Sudamérica estallaron en indignación por el desvío del avión presidencial boliviano ante versiones de que escondía al fugitivo estadounidense Edward Snowden, y convocaron a una reunión para condenar un hecho que consideraron injustificable.

El inusual tratamiento al líder socialista, un crítico de Washington, tocó una fibra sensible en Latinoamérica y llevó a líderes a acusar a la Casa Blanca de estar detrás del incidente. La región tiene una historia de altibajos con Estados Unidos, que pese a ser uno de sus mayores socios comerciales también es recordado por décadas de flagrante intervencionismo político.





La aeronave del presidente Evo Morales tuvo que aterrizar el martes en Viena cuando regresaba a Bolivia de una conferencia en Rusia, luego de que Francia y Portugal prohibieron que sobrevolara su espacio aéreo.

Morales había dicho en Moscú que estaba dispuesto a evaluar la solicitud de asilo del ex contratista de la CIA Snowden, que se encuentra en un limbo legal en el aeropuerto de esa ciudad y es reclamado por Estados Unidos después de que divulgara información secreta sobre sus programas de vigilancia.

Ministros bolivianos denunciaron que el desvío del avión presidencial se debió a las presiones de la Casa Blanca, que busca extraditar a Snowden.

La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) expresó el miércoles en un comunicado “su indignación y profundo rechazo por tales hechos que constituyen actos inamistosos e injustificables que, además han puesto en serio riesgo la seguridad del Jefe de Estado boliviano y la de su comitiva”.

El bloque, formado por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, pidió explicaciones de los hechos y convocó a una reunión ministerial en Lima el jueves.

Los presidentes de Argentina, Ecuador, Uruguay y Venezuela se iban a reunir el mismo jueves por iniciativa propia y fuera del marco del bloque en la ciudad boliviana de Cochabamba, según autoridades bolivianas y peruanas.

“Definitivamente están todos locos. Jefe de Estado y su avión tiene inmunidad total. No puede ser este grado de impunidad”, fustigó la presidenta argentina, Cristina Fernández, en su cuenta de Twitter.

“Vestigios de un colonialismo que creíamos totalmente superado. Creemos que constituye no solamente una humillación a una nación hermana sino también al continente sudamericano”, dijo Fernández.

Snowden llegó a Moscú el 23 de junio procedente de Hong Kong, a la espera de que algún país le dé asilo y así evitar los cargos de espionaje en Estados Unidos. Aunque hizo una solicitud formal a Ecuador, el presidente Rafael Correa aclaró que no puede tramitarla mientras no se encuentre en su territorio.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, advirtió que dar refugio a Snowden puede acarrear serios costos.

“NINGUN DELINCUENTE”

El avión presidencial boliviano estuvo varado por unas horas en Viena, donde autoridades austríacas dijeron que funcionarios le habían dado un vistazo. Pero el Gobierno de La Paz aseguró que no fue una requisa.

De allí, la aeronave hizo escala en la isla española Gran Canaria, donde el Gobierno español insistió en revisar el avión a pesar de que Morales negó que Snowden estuviera a bordo.

“El Presidente fue muy claro y dijo que no iba a aceptar ese tipo de requisa porque él estaba hablando la verdad y no era ningún delincuente para someterse a ese tipo de acciones que vulneraban además del derecho internacional”, dijo el ministro de Defensa de Bolivia, Rubén Saavedra, vía telefónica desde el avión cuando hizo una escala técnica en suelo español.

Después de cargar combustible, el avión partió hacia su próxima escala en la ciudad brasileña de Fortaleza. Se esperaba que el presidente aterrice en La Paz por la noche.

Mientras Morales estaba en ruta hacia su país, las autoridades bolivianas convocaron a una concentración para recibir a su presidente y se registraron protestas aisladas en la sede de la embajada de Francia.

Los gobiernos de Venezuela, Nicaragua, Cuba y Uruguay condenaron el incidente.

“Nuestra palabra solidaria con el hermano pueblo de Bolivia, cuyo digno, patriota Evo Morales está siendo en este momento objeto de una agresión imperial, es una agresión contra América latina toda, frente a la cual América Latina que se pone de pie y dice ya basta”, dijo el ministro de Comunicación de Venezuela, Ernesto Villegas.

A pesar de todo, el ministro boliviano Saavedra dijo que finalmente Francia, Portugal, Italia y España habían colaborado para que el presidente volara sin inconvenientes.

“Eso muestra con claridad que implícitamente están reconociendo el grave error que cometieron”, sostuvo.

Reuters