CarGo usando un arma de doble filo

Foto: AFP

 

Carlos González está aprendiendo a ser un bateador más paciente. Desde 2008 a 2012 el jardinero vio un promedio de 3.65 pitcheos por cada viaje a la caja de bateo, mientras que en esta temporada la cifra está en 3.92.

Como consecuencia de ello, CarGo ha tomado más boletos y proyecta cerrar la campaña con 69, lo que sería el mayor número de su carrera (por ahora son los 56 que tomó en 2012). Sin embargo, esta es un arma de doble filo.





Al González estar dejando pasar más pitcheos, lógicamente ha dejado pasar algunos strikes también (le ha hecho swing al 67.8% de los envíos en zona buena que ha visto este año, una cifra similar a la que tuvo en 2012), lo que en pocas palabras se traduce en una sola cosa: más boletos sí, pero también más ponches.

Hasta antes de la jornada de ayer, González exhibía 97 ponches, la cuarta cifra más alta en la Liga Nacional; y proyectaba culminar la campaña con 185. Sería por lejos la mayor cantidad en su hoja de vida (abanicó la brisa en 135 ocasiones en 2010) y superaría el récord para un venezolano, en poder de Andrés Galarraga, quien se ponchó 169 veces en la zafra de 1990.

Pero CarGo no se ha ponchado tanto únicamente por dejar pasar más pitcheos de lo usual. El zuliano está haciendo un swing más largo, tratando de levantar más sus conexiones.

Con información de liderendeportes.com