El Mundial de Atletismo pierde interés tras numerosos casos de dopaje

El Mundial de Atletismo pierde interés tras numerosos casos de dopaje

Un año después de que el atletismo fuera el corazón de los Juegos Olímpicos de Londres, el Mundial de este deporte corre peligro de perder su brillo tras una serie de ausencias por dopaje y por lesiones, que han quitado parte del encanto al evento que se llevará a cabo en Moscú.

Después de que Tyson Gay y Asafa Powell fueran excluidos por dar positivo en controles antidopaje y de que el actual campeón de 100 metros Yohan Blake fuera descartado por lesión, parece que solo una repetición de la salida nula de Bolt en Daegu hace dos años podría evitar que el jamaiquino recupere el título.





Si Bolt falla de nuevo, la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) se enfrenta a un escenario digno de una pesadilla que podría llevar a la medalla de oro al estadounidense Justin Gatlin, un velocista que ha sido dos veces sancionado por dopaje. Un triunfo de Gatlin sellaría un terrible verano boreal para el atletismo, salpicado por múltiples casos de dopaje que han puesto en duda la honorabilidad de este deporte.

La campeona olímpica de 1.500 metros, la turca Asli Cakir Alptekin, es uno de las muchos atletas de su país que han dado positivo en controles de dopaje recientemente, mientras que el país anfitrión, Rusia, tiene en la actualidad más de 40 sancionados y varios deportistas más que pueden volver a competir tras cumplir penas por dopaje.

El actual campeón mundial y olímpico de 800 metros, el keniano David Rudisha, verá la competición desde casa debido a una lesión de rodilla. También faltarán a la cita la campeona olímpica del heptatlón Jessica Ennis-Hill y la campeona mundial de la misma prueba Tatyana Chernova, ambas lesionadas.

TODOS LOS FOCOS EN BOLT

Todo ello hace que los focos se centren aún más en Bolt, quien posiblemente compartirá el protagonismo con la velocista estadounidense Allyson Felix, la joven sensación de los 400 metros Kirani James y la fondista etíope Tirunesh Dibaba.

En 2009, Bolt igualó las victorias conseguidas en los Juegos de Pekín y ganó los 100 y 200 metros con récords del mundo que todavía permanecen vigentes.

Dos años después, en Corea del Sur, las cosas no se dieron bien para el jamaiquino, quien realizó una salida nula que lo llevó a ser descalificado de la prueba de 100, facilitándole el trabajo a Blake.

Sin embargo, Bolt se recompuso para ganar los 200 metros y los relevos y parece poco probable que no consiga en Moscú un nuevo doblete o incluso un triplete.

Bolt marcó 9,85 segundos en los 100 metros de un evento de la Liga Diamante realizado en Londres la semana pasada a pesar de un mal comienzo.

“Creo que las rondas previas al Mundial deberían ayudarme a liberar mis piernas”, dijo Bolt.

Gatlin, que derrotó sorprendentemente a Bolt en los 100 metros en junio, parece ser el mayor rival del jamaiquino junto a su compatriota Nesta Carter, cuyos 9,87 segundos logrados en Madrid el 13 de julio lo convierten en el segundo hombre más rápido sobre la pista.

Otro jamaiquino, el medallista de bronce olímpico en 2012 Warren Weir parece el único capaz de acercarse a Bolt en los 200 metros tras completar su preparación con una victoria en Londres con un tiempo de 19,89, pero sus oportunidades dependerán de si el campeón tiene un mal día.

El Mundial también será un momento emocionante para la gran saltadora con pértiga rusa Yelena Isinbayeva, que se retirará tras finalizar el campeonato.

La bicampeona olímpica de 31 años no pudo conseguir medalla en los dos últimos mundiales y ha tenido problemas de forma este año, pero tratará de acercarse a los cinco metros con su salto.

El Mundial se disputará entre el 10 y el 18 de agosto en la capital rusa. Reuters