El ferry “Virgen del Valle II” en el puerto de Tenerife (fotos inéditas)

El ferry “Virgen del Valle II” en el puerto de Tenerife (fotos inéditas)

El catamarán Virgen del Valle II en el puerto de Tenerife, España, el pasado 10 de agosto de 2013. Foto Juan Carlos Díaz Lorenzo

 

El catamarán venezolano “Virgen del Valle II” arribó al puerto de Santa Cruz de Tenerife el sábado 10 de agosto con tres horas de retraso sobre la hora estimada. A bordo se encontraba el práctico Carlos Fumero, que salió a su encuentro a unas dos millas entre puntas.

Se trata de una escala técnica para suministrarse combustible y avituallarse antes de emprender el largo viaje de cruce del Atlántico rumbo a El Guamache y Puerto la Cruz, donde comenzará una nueva etapa por cuenta de la compañía Consolidada de Ferrys C.A. (Conferrys), expropiada en septiembre de 2011 a golpe de decreto por el difunto presidente Hugo Chávez. Conferrys atiende la línea de la isla Margarita, el más importante de los destinos vacacionales de Venezuela.

El catamarán “Virgen del Valle II”, a su llegada al puerto de Santa Cruz de Tenerife

El buque inicia una nueva etapa con el nombre de “Virgen del Valle II”

A la contraseña de Conferrys, fundada en 1965, pertenecieron también los ferries “Isla de Cubagua” (ex “Skandia”) e “Isla de Coche” (ex “Nordia), comprados a la compañía finlandesa Silja Lines y a los que vimos pasar en octubre de 1974 por el puerto de Santa Cruz de Tenerife, en el viaje de entrega a Venezuela. Los cascos de estos buques eran idénticos a los de los buques “Botnia” y “Floria”, adquiridos en 1975 por Compañía Trasmediterránea y rebautizados “Ciudad de La Laguna” y “Villa de Agaete”.

Hasta hace unos días, el catamarán “Virgen del Valle II” era propiedad de Trasmediterránea. Ex “Pacífica”, ex “Euroferrys Pacífica”, el buque operó durante su etapa española en las líneas del Estrecho y en los últimos años ha permanecido amarrado a intervalos y estaba en venta desde hacía tiempo, al igual que otros buques de la citada compañía del Grupo Acciona. En los planes de la nacionalizada Conferrys figura dotarla de buques más nuevos y de mayor capacidad, sin que importe en exceso el consumo de combustible, pues en Venezuela la producción y el precio está mucho más asequible que en la maltrecha economía europea.

En ambos costados está pintada una alegoría de la bandera de Venezuela

En las chimeneas todavía aparece pintada la contraseña de Trasmediterránea

Construido por encargo de la compañía Euroferrys, en otro tiempo competidora y después adquirida por Trasmediterránea, se trata de un buque de alta velocidad de factura australiana, uno de los proyectos emblemáticos de Austal Ships, estrenado el 24 de mayo de 2001 en la línea Algeciras-Ceuta. El 10 de junio de 2004 su nombre saltó a primera plana informativa tras una colisión con el fast-ferry “Almudaina”.

Es un buque de 8.397 toneladas brutas y 750 toneladas de peso muerto, en un casco de 101 m de eslora total, 26,65 m de manga y 4,65 m de calado. Está propulsado por cuatro motores Caterpillar con una potencia de 28.800 kw que accionan cuatro “water-jets” y le permite mantener una velocidad de 37 nudos. Puede transportar 951 pasajeros y 251 vehículos. Cuando se incorporó a la línea del Estrecho causó auténtica sensación y hasta su venta ha sido el mayor buque de su clase que ha operado en la zona. Código IMO 9235866.

El buque se estrenó en mayo de 2001 con el nombre de “Euferrys Pacífica”

El buque, de construcción australiana, figuró en su día entre los mayores del mundo

En su nueva etapa figura inscrito en la matrícula naval de Pampatar

Lo vimos maniobrar con tal facilidad que pareciera un asiduo de nuestro puerto

Detalle del alerón de estribor del catamarán “Virgen del Valle II”

Vista de proa del catamarán “Virgen del Valle II”, listo de maniobra

Texto y Fotos: Juan Carlos Díaz Lorenzo en el Blog “Del Acontecer Marítimo

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