La decisión tomada hace 10 días por Gretty Leonelis Núñez Centeno, de 19 años, de separarse definitivamente de su concubino, el oficial agregado Juan Antonio Loreto (28 años) selló su sentencia de muerte, así como la de la bebé que llevaba ocho meses en el vientre, y de su padre Leonardo José Núñez Rodríguez (44).
Tras una agonía de pocas horas, la muchacha dejó de existir el miércoles a las 11:30 pm, en el quirófano del hospital general de El Tigre.
Su tío político, Ricardo Solórzano, señaló que la pareja llevaba viviendo un año y seis meses, pero todo cambió desde que la muchacha salió embarazada.
En mayo pasado, los padres de Gretty, Leonardo Núñez y Yasmira Centeno, le exigieron al funcionario que se fuera de la casa, ubicada en la avenida 12 del barrio La Charneca de El Tigre, porque observaron que su hija vivía angustiada y temerosa.
Luego se reconciliaron y se mudaron a una pensión, pero al poco tiempo la joven regresó a la residencia familiar debido a que las cosas no andaban bien. Supuestamente, Grety se enteró de que su marido mantenía amoríos con otra mujer.
“El policía siempre la buscaba para reclamarle, la insultaba, la golpeaba y amenazaba porque se negaba a retomar la relación. Allegados y vecinos advertían a los parientes que los veían discutiendo en la calle, pero mi sobrina lo ocultaba para no preocupar a su papá. Ese hombre se encargó de desgraciar a la familia”, afirmo Solórzano.
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