BCV vendió 335,5 millones de dólares en subasta del Sicad

BCV vendió 335,5 millones de dólares en subasta del Sicad

Foto Archivo

El Banco Central de Venezuela (BCV) vendió el viernes 335,5 millones de dólares en una subasta de divisas dirigida a aliviar los requerimientos de la temporada navideña para las empresas locales y la sed de dólares de la población, en un país que acumula una década bajo un férreo control cambiario, informa Reuters.

La colocación estuvo respaldada con un bono de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) con vencimiento al 2035 con un valor nominal de 300 millones de dólares. El monto real adjudicado fue el 80 por ciento del valor, 239,7 millones de dólares, y se destinó a personas jurídicas.

La industria juguetera nacional dijo el mes pasado que en todo el año no obtuvo dólares oficiales para importaciones, lo que redujo dramáticamente la oferta, y advirtió que de seguir por ese rumbo los anaqueles de las jugueterías estarían vacíos para Navidad.





Las compañías favorecidas fueron las de los sectores de alimentos y comercio (únicamente productos de la cesta navideña), manufactura (incluyendo juguetes), textil y químico.

La subasta del Sistema Complementario de Administración de Divisas (SICAD) -cuyo tipo de cambio no fue revelado- también estuvo destinada a personas naturales quienes recibieron 35,5 millones de dólares, en su mayoría, para ser usados en viajes al exterior.

En la última subasta realizada a finales de julio, el BCV vendió 210 millones de dólares, más que la oferta inicial de 180 millones de dólares, con un tipo de cambio promedio que el mercado colocó cercano a 11 bolívares por dólar.

El Gobierno se ha negado a revelar el valor resultante de las pujas, una medida criticada por el sector privado bajo el argumento de que se dirige a ciegas a las operaciones.

El BCV ha mantenido su plan original de hacer dos subastas mensuales de montos variables con un tipo de cambio por encima de la cotización oficial controlada de 6,3 bolívares por dólar.

La merma en la asignación de divisas en Venezuela, unida a una caída en el gasto público, ha ralentizado el crecimiento económico y disparado la escasez en un país que importa la mayoría de los bienes que consume.

El Gobierno del presidente Nicolás Maduro espera que el Sicad y la agilización de la venta de divisas controladas puedan detener la inflación que superó el 42 por ciento en su variación anualizada hasta julio.

Las autoridades financieras aspiran a reducir el precio de la divisa en el mercado negro, donde el dólar se vende hasta seis veces más caro que el valor oficial.