Raul Gallegos: Cinco pasos para ganar las elecciones en “revolución”

Raul Gallegos: Cinco pasos para ganar las elecciones en “revolución”

Para los estadounidenses y otros observadores extranjeros, el presidente venezolano Nicolás Maduro parecería estar perdiendo contacto con la realidad . ¿Cómo explicar su reciente plan para defenderse de los ataques enemigos mediante la instalación de armas antiaéreas en los barrios pobres alrededor de Caracas , o su insistencia en que los trabajadores de un túnel subterráneo vieron en una piedra la cara de Hugo Chávez ?

Pero si se hace una mirada más profunda a lo que está ocurriendo en el período previo a las elecciones municipales que se realizarán en todo el país el 8 de diciembre, se entenderá que estos extravagantes incidentes son parte de la campaña del presidente para intentar que su partido gane la mayoría de los municipios, a pesar de su débil mandato.

Brillar a través de sus travesuras es una fórmula de como un político populista gana y se aferra al poder:





1 . Haga que los pobres se sienten poderosos.
Maduro, al igual que su mentor y predecesor Hugo Chávez , está consciente de la importancia de dar a los votantes la ilusión de fuerza. Esto explica por qué el presidente ha respaldado públicamente a Brasil y a Alemania en sus denuncias de espionaje digital por parte de EE.UU.  y por qué se comprometió la semana pasada en instalar sistemas de armas antiaéreas para defender a la gente en los barrios pobres contra los enemigos “imperialistas “. Provocar a los EE.UU. y prepararse para una invasión inexistente es una manera segura de ganar simpatizantes en la extrema izquierda.

2 . Fomente un aura mística
En una nación de gente profundamente religiosa, el abarcar el simbolismo religioso es una estrategia ganadora. La reciente afirmación de Maduro que una imagen de Chávez apareció en una pared de un túnel excavado puede parecer una desagradable historia de fantasmas para muchos, pero les da esperanza a aquellos que idolatraron al líder muerto. En Cuba Fidel Castro convirtió al Ché Guevara en un icono venerado , cuya imagen llevan ahora los adolescentes en las camisetas. Muchos regímenes de izquierda ganan poder, apelando no a la lógica de la gente sino a su espiritualidad.

3 . Invente nuevos enemigos
La paranoia inducida por el Estado puede ser una poderosa arma política. Maduro recientemente acusó a Twitter y a la “derecha internacional” de estar tratando de desestabilizar al gobierno venezolano por el borrado de unos 6.600 seguidores en su cuenta. La semana pasada denunció una “guerra silenciosa” para socavar su gobierno, supuestamente liderada por EE.UU. y los organismos colombianos en conjunción con la oposición venezolana. En la cima de las acusaciones de Maduro está la de la  primavera pasada cuando señaló que el ex presidente colombiano Alvaro Uribe estaba conspirando para matarlo. Apareciendo como el defensor de las personas de uno o más hombres malvados puede hacerle ganar soportes políticos.
4 . Gobierne “parapeteando” a corto plazo.
La política populista dicta que si se rompe algo, “parapetéelo” (arréglelo a medias), no lo repare. El nuevo grupo de trabajo para combatir el producto del acaparamiento y la especulación que Maduro anunció la semana pasada y el Centro Nacional de Comercio Exterior se crearon para gestionar con más fuerza las importaciones y controlar las divisas, pero no hacen nada para aflojar la soga regulatoria con la que el gobierno ha ahorcado a las empresas durante años. Tiene la finalidad ofrecer la apariencia de buen gobierno. Un saneamiento de la política económica en un país rico en petróleo obligaría a las personas a restricciones. Y hacer que la gente se sacrifique significaría menos votos.

5 . Haga que la Navidad llegue pronto
Literalmente. En una nación rica en petróleo, el político que regale más dinero gana. Maduro lo sabe, y es por ello que decidió pagar el bono decembrino (aguinaldo) con un mes de anticipación,  justo antes de la elección del 8 de diciembre. Este es el mismo tipo de felicidad para las masas que Maduro tenía en mente cuando recientemente ordenó la ocupación militar de la cadena de electrodomésticos Daka para que fuesen vendidos al público a precios de remate, y creó el ” Vice Ministerio para la Suprema Felicidad Social “, que se ocupa de la gestión de las subvenciones y otros programas asistencialistas, que son populares entre sus seguidores . Incluso en una revolución  inspirada en el socialismo como la de Venezuela, el dinero supera a la ideología en todo momento.

El libro de jugadas populistas de Maduro ciertamente mantiene a la gente entretenida. Un gasto público generoso y distracciones habituales hacen que los venezolanos sobrelleven el sufrimiento de una inflación anual del 54% – la más alta en 16 años – y las largas colas que se producen cuando los consumidores tratan de comprar los productos que frecuentemente escasean.

En un mundo de bajas expectativas, donde la democracia es sólo un eslogan, un poco de pan y teatro político pueden mantener un gobierno en el poder.

 

Publicado originalmente en The Ticker de Bloomberg como “Five crazy steps to winning a venezuelan election”. Traducción libre por lapatilla.com

 

Raul Gallegos es el correponsal en Latino America para el World View blog y colaborador para The Ticker. Follow him on Twitter. E-mail  [email protected]